En San Juan, Puerto Rico durante el último año ha habido un auge de ciclistas por las calles de la capital caribeña. Esto ha generado un interesante debate tanto en la opinión pública y en la legislatura, en el ámbito de educar al público y de crear una infraestructura que acople a los ciclistas. También para establecer normas adecuadas para todas las personas que transiten por las calles; peatones, automóviles, camiones, motoras y bicicletas.
No es nada nuevo en el Caribe el uso de las bicicletas. En Cuba durante los años 1980 y 1990 se estableció por parte del gobierno cubano el uso masivo de bicicletas. Esto luego de que la culminación de la Unión Soviética y el fin de las relaciones mercantiles que favorecían a Cuba, lo que se llamó el período especial. En ese sentido, hubo una restructuración económica en Cuba y el gobierno respondió con exportación masiva de bicis chinas. Era divertido ver las imágenes de miles de cubanos, corriendo por las calles, con el fin de ahorrar dinero en el combustible de la transportación pública.
Igualmente, en varias ciudades de América, Asia, África y de Europa el uso de la bicicleta es muy difundido. Cabe mencionar, que en varias ciudades europeas correr bici es muy seguro; con áreas designadas especialmente para ello, con carriles exclusivos y normas claras para toda la población. Tener una zona urbana habilitada para el ciclismo es sinónimo de urbanismo y progreso a nivel mundial.
En Puerto Rico lamentablemente ese no es el caso. Los ciclistas de San Juan tienen que batallar con el feroz tráfico y no hay normas claras tanto para los ciclistas como para los conductores. Es verdaderamente una zona de batalla, el manejar una bici. Inclusive tan recientemente como hace meses un distinguido abogado fue arrollado por un vehículo hiendo a exceso de velocidad. No ha sido el único muerto la situación es verdaderamente alarmante ante la nueva tendencia de usar la bici como un medio de transportación.
Tal vez el aumento en el uso de bicis ha sido motivado por el alto costo en la gasolina, la Gran Recesión y la dificultad de que personas jóvenes que comienzan a laborar se puedan comprar un vehículo. También se le debe añadir el factor de moda.
La moda de las bicicletas y el “bici-jangeo” han causado sensación en los jóvenes capitalinos. Usualmente salen de noche, cuando es más fresco y van corriendo a distintos locales y/o parques para socializar. El “bici-jangeo” se ha convertido en una subcultura.
Cabe mencionar que existen leyes que regulan el ciclismo; la Carta de Derechos del Ciclismo y la Ley de Tránsito. El problema es que son leyes muertes que no se aplican. Por ejemplo, ¿a cuantos ciclistas usted conoce que le hayan dado una multa por no llevar casco o por no llevar luz en la bici?
Así las cosas, en la Cámara de Representantes y en el Senado de Puerto Rico hay varios proyectos de ley que pretenden mejorar la situación del ciclismo.
Los proyectos son las siguientes:
1- PS 149: Para crear el Programa Piloto "Rutas Seguras Para Ciclistas", adscrito al Departamento de Transportación y Obras Públicas de Puerto Rico, con el fin de desarrollar, diseñar, y establecer un plan integral de transporte alterno como medio de traslado a zonas de empleos, centros de estudios y áreas turísticas de nuestra Isla.
2- PC 1040: A los fines de prohibir el conducir, alterar, modificar o fabricar una bicicleta mediante la instalación o fijación de un motor de gasolina que exceda de cinco (5) caballos de fuerza; tipificar como delito grave la alteración de las mismas y otros fines relacionados.