El español, Leo Díaz y Ricky Roselló, y el nuevo califato Boricua

Justicia Social

En las pasadas 48 horas, el país se ha enfrentado a dos momentos de interesante definición. Por un lado, se ha planteado, nuevamente, por el senador más longevo de Puerto Rico, el oficialista, Partido Popular Democrático (PPD), Antonio Faz Alzamora, que legisle a favor de que el idioma español sea el oficial del gobierno de Puerto Rico, y que el inglés vuelva a pasar a un segundo término. Esto pasa en el momento en que por 42 años Jorge Rashke y su grupo religioso han organizado la actividad sacra-política Clamor a Dios, este nos invita a volver al pasado, en particular en cuanto al tema de las parejas de mismo sexo se refiere en Puerto Rico. Lo peor, es que los líderes emergentes del Partido Nuevo Progresista (PNP), Ricky Roselló y Leo Días, por su mera presencia y no distanciarse de dicho pronunciamiento, de facto endosan esa postura. Es decir, Rashke nos invite a un “Califato Cristiano” en Puerto Rico.

El senador Faz Alzamora le interesa enmendar la Ley 1 de 28 de enero de 1993, impulsada por el gobernador pro-estadidad, Pedro Roselló, la cual promueve que tanto el español como el inglés sean idiomas oficiales del gobierno de Puerto Rico. Devolver al estatus solo del español, según el senador Faz Alzamora, es darle un poco de dignidad a nuestro idioma pre-los EE.UU. Si bien es cierto que se trata de un poco de justicia lingüística para Puerto Rico, no es menos cierto que lo correcto sería hoy promover una legislación un tanto más caribeñista. Es decir: “será la política pública del gobierno de Puerto Rico promover como idioma oficial el español, y como idiomas oficiales secundarios, el inglés, el cruceño, el holandés y el francés”. Lo que sería interesante es que, en un país donde el último censo federal del 2010 indica que menos del cinco por ciento de la población habla inglés, que se vea esta oportunidad para fomentar otros idiomas que nos permitan ser más competitivos en el caribe. Hoy el 40 porciento de la población de USVI Santa Cruz, es de origen puertorriqueño, y habla el idioma local llamado cruceño. ¿No nos hace esto pensar en otra dirección? El Departamento de Salud de Puerto Rico, tiene hoy bastante comercio de salud con San Martin. ¿No debemos de aprender francés y holandés?

De otra parte, Jorge Rashke promovió ayer la vuelta al pasado en Puerto Rico. Un tipo de retorno al país donde papá y mamá eran hombre y mujer. Condenó todo tipo de legislación que promueve igualdad o equidad de género. Lo curioso es que solo los líderes del Partido Nuevo Progresista, en particular Ricky Roselló y Leo Díaz, asistieron. La postura de Raschke es abominable. Es terrible para lo que ya se adelantó en el país. Pidió a sus seguidores que se inscriban y que organicen un partido político cristiano para derrocar a los políticos. Porque el PNP estaba allí no sabemos. Pero este junte nos recuerda a los tiempos en que Rashke logró ser poderoso y subía y bajaba políticos. Hoy suena, en el contexto mundial, al llamado a un tipo de “Califato Cristiano”.

Ante esto, hay que darle una lección a Raschke y a los políticos de turno que por tal de llegar al poder están dispuesto a quietarle derechos adquiridos al pueblo. Seamos solidarios con la comunidad LGBTT y los derechos adquiridos por estos. Dile no a los que promueven un califato en Puerto Rico.