Me quitaran mi pensión

Voces Emergentes

altLucía compartía todas las tardes en su balcón con Miko, su gato, el pasar de los días desde que se retiró de oficinista luego de treinta años de trabajo. Esperaba al cartero todas las tardes a quien podía saludar y hablar brevemente de la cotidianidad de la vida.

-Saludos, ¿cómo están ustedes?- preguntó el cartero, entregándole la correspondencia.

- Aquí aplatanada en el sillón como todas las tardes- contestó Lucía

Recibió la correspondencia que le entregó el cartero. Un sobre más grande sobresalía de los demás. La carta iba dirigida a ella. Cuando lo abrió leyó algo que decía “Bar Date Notice and Proof of Claim Form” relacionado con el “U.S. District Court foor the District of Puerto Rico”. No entendió nada, aunque estaba en español e inglés.

-¿Qué será este documento? Nunca he tenido problemas con los tribunales y mucho menos con un tribunal federal- se preguntaba.

Desde que se retiró de su empleo la pensión era la única fuente de ingresos. El dinero lo utilizaba para cubrir las necesidades básicas y los gastos médicos por una condición de salud crítica que la estaba afectando. No tenía más familia que el gato Miko, que al igual que ella, cargaba el cansancio que los años producen.

-Escuché algo en el noticiero sobre el problema del gobierno con los fondos de retiro. No podían continuar pagando las pensiones a los retirados porque estaban en quiebra. ¿Estará esto relacionado? - pensaba Lucía.

-Trabajé toda la vida con el gobierno por las garantías de pensión que ofrecían al retirado. ¿Cómo imaginar que luego de tanto trabajo me quede sin ingresos? - le dijo a Miko.

-¿De qué tratará esta carta que menciona una deuda del gobierno y el Sistema de Retiro? ¿Qué tú piensas Miko? - continuó Lucía.

Miko apenas levantaba su cabeza al escuchar a Lucía. Miraba fijamente a la compañera de tantos años con la tristeza que reflejan las condiciones de salud en la vejez.

Siempre entendió que era un problema entre bonistas y el gobierno por el mal manejo de las finanzas gubernamentales. No podía entender como ella era parte de un litigio federal en el que incluyeron su nombre sin ella saberlo.

-Me han hecho parte de un caso federal del cual desconozco todo. Me quitarán la pensión que luego de tanto esfuerzo de trabajo me entendí merecedora- pensaba.

Lucía se levantó, agarrando el tanque de oxígeno, y caminó hasta su cuarto, puso las cartas sobre la mesa de noche. Tomó sus medicinas y se acostó en la cama junto a Miko.

-El gobierno nos engañó, estamos los más vulnerables pagando la mala administración gubernamental por una partida de corruptos- le dijo a su amigo Miko, mientras pensaba en el futuro incierto que una simple carta pronosticaba.