Fernando Soto el comediante mexicano que murió ciego y sin dinero

Voces Emergentes

altFernando Soto “Mantequilla” fue uno de los comediantes más populares del cine mexicano. Pese a que trabajó como en 160 películas, su final fue muy triste. La diabetes lo dejó ciego y sin movilidad en el brazo izquierdo, muriendo de un coma diabético. En una ocasión el comediante rechazó una oferta de Alejandro Jodorowski para La montaña sagrada porque tenía que aparecer desnudo en una iglesia donde lo flagelaban.

Aunque le iban a pagar lo que no se ganaba en diez películas, el comediante no aceptó. “Basta ya de que siempre aparezcas como charrito o peladito en esos infames churros. Entra en el cine de vanguardia” le dijo Jodorowski. “Era una manera de venderle el alma al diablo. Yo, pobre pero con mi conciencia tranquila, así me digan pobre o peladito” dijo Soto. Sobre su apodo de Mantequilla se han dado varias versiones.

Una dice que se lo pusieron porque era muy resbaloso con las mujeres. Cuando enfermó estaba sin un centavo por lo que su amigo Jaime Fernández organizó una cena en la que sus compañeros aportaron para ayudarlo. Después que trabajó con Tin Tan en Me traes de un ala, se publicó que Germán Valdés no quiso volver a trabajar con él porque temía que lo opacara.

Con Cantinflas hizo Ni sangre ni arena, Gran hotel y El analfabeto; con Pedro Infante Ustedes los ricos, Pepe el Toro, El seminarista, Los tres García, Vuelven los tres García, Los tres huastecos y Soy charro de Rancho Grande; con Pedro Armendáriz Juan Charrasqueado; con Jorge Negrete El rebelde y con David Silva Campeón sin corona, por la que recibió un premio Ariel de Mejor Coactuación masculina. Hizo dos películas con el gran director español Luis Buñuel: La hija del engaño y La ilusión viaja en tranvía. En su tumba, que visité en el Panteón Jardín, también está enterrado su padre Roberto Soto “El Panzón”, que fue un comediante muy popular en la época de las carpas.