Jonathan Pryce y Anthony Hopkins dan cátedras de actuación como el Papa Francisco y el Papa Benedicto en Los dos Papas, que imagina lo que hubiera ocurrido si estos dos religiosos hubiesen confrontado sus ideas y personalidades.
Este preámbulo nos lleva al viaje de Bergoglio a Roma para pedirle al Papa Benedicto que acepte su renuncia. Benedicto teme que esa renuncia pueda ser interpretada como una protesta liberal contra su papado conservador. Ambos religiosos se reúnen a conversar y confrontan sus ideas totalmente distintas. En el proceso Benedicto siente que la Iglesia Católica necesita un Papa liberal que cambie la rigidez del Vaticano.
En el film se menciona el pasado nazi de Benedicto y la conducta de Bergoglio durante las dictaduras militares argentinas, que fue objeto de críticas por su relativa pasividad. Juan Minujín interpreta al atormentado Bergoglio de la época de los dictaduras que le costaron la vida a más de 30,0000 argentinos incluyendo sacerdotes y monjas.
El guión de Anthony McCarten contrapone a Benedicto, que antes de ser Papa dirigía la Congregación de la Doctrina de la Fe, sucesora de la Inquisición, con Bergoglio, nacido en un hogar pobre y conocido por sus ideas liberales y una conducta que rechaza la ostentación.
Los dos Papas fue dirigida por el brasilero Fernando Meirelles, realizador de City of God, The Constant Gardener y Blindness, sobre la novela homónima de José Saramago.