(San Juan, 10:00 a.m.) Puerto Rico, país cuyos habitantes están acostumbrados a “vivir” en que supone ayudarnos salir de ella para así satisfacer los deseos de los bonistas que proveyeron a la isla préstamos buitres con la intención de enriquecerse un tanto más con los intereses de esta deuda. La Junta de Supervisión Fiscal (JSF) es el nombre del ente fiscalizador instalado junto al proyecto de ley PROMESA ahora amenaza los fondos de las pensiones del retiro los empleados públicos. Pensiones para las que estos trabajaron años, décadas, de sus vidas.
Esto es un atentado contra la calidad de vida de las más de 170,000 personas jubiladas y 120,000 empleados activos cuando a estos les llegue el momento de gozar de sus retiros. Como debe ser, porque por eso sirvieron y mantuvieron el compromiso con el país. Porque es de conocimiento popular que los ciudadanos que son empleados de la isla son considerados competentes en más de un lugar en el mundo. Es debido a esta injusticia que se dio el génesis del Proyecto de la Cámara 2434 (PC2434) el cual asegura la integridad de las pensiones. Con este proyecto se crea la Ley para un Retiro Digno donde se establecen las políticas públicas que exoneran a las pensiones de los trabajadores de cualquier recorte de fondos considerado en diálogos relacionados al saldo de la deuda.
Nos es negociable la consideración de este proyecto de ley puesto que estas pensiones no constituyen un regalo o bonificación por parte del gobierno hacia los servidores públicos. Aun así, la Cámara al considerar el PC2434 le añadió enmiendas que no son acogidas por el cuerpo de trabajadores y por si fuese poco dejaron la reunión inconclusa en cuanto a la aprobación e implementación del mismo se refiere.
Callados no van a permanecer. Por ello hoy habrá una conferencia de prensa en el Salón Alma Delgado del Colegio de Abogados y Abogadas de Puerto Rico a las 11:00 a.m. Esta conferencia es convocada por varios sindicatos entre los cuales está La Central Puertorriqueña de Trabajadores (CPT).
Es triste llegar a la égida confiando en que lograrás descansar en vida y gozar de las bellezas de ese país al que le dedicaste tu vida productiva para enterarte de que no vas a poder utilizar la pensión para la que trabajaste. Desgarra cualquier corazón latente el escuchar a esos que han velado por nuestra alimentación, educación, salud y seguridad hablar sobre marchar para protestar exponiéndose conscientemente al Covid-19 razón de miles de muertes y de la pandemia que está vigente y cobrando vidas en la isla. Hasta en estos tiempos que se supone estemos seguros hemos de estar a Dios rogando y con el mazo dando. El gobierno no debe olvidar que las herramientas de trabajo de nuestros servidores públicos son armas blancas, comenzando con la palabra.