Contrario a la percepción de que el candidato presidencial demócrata Joe Biden inclinó la balanza del debate sobre el estatus de Puerto Rico, al mostrar su preferencia personal hacia la anexión, la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz Soto, aseguró que también ha habido de su parte un reconocimiento al carácter nacional de los puertorriqueños.
En tal sentido, resaltó que Biden ha sido consistente en su preferencia, mas se ha comprometido con un proceso de libre determinación del pueblo puertorriqueño, que será el que decida, a partir de la legislación que impulsan las congresistas demócratas Nydia Velázquez y Alexandria Ocasio Cortez, ambas electas por Nueva York.
“Al comprometerse con un proceso de esa naturaleza, (Biden) reconoce que Puerto Rico es una nación, y por eso habla de libre determinación, de derechos humanos, no derechos civiles”, dijo Cruz Soto a la agencia Inter News Service (INS) al tirar una raya ante el lenguaje que emplea el sector anexionista de esta isla del Caribe, invadida por Estados Unidos hace 122 años.
Con su postura, a juicio de la avezada política puertorriqueña que ha ganado gran presencia en la escena estadounidense a partir de sus enfrentamientos con el presidente Donald J. Trump por su trato mordaz hacia Puerto Rico y su gente, el demócrata Biden reconoce la importancia de vincular al Congreso a cualquier proceso de descolonización, que excluya la opción territorial, como lo es la Asamblea Constitucional de Estatus.
Cruz Soto explicó que “si ata esto a que el congresista Raúl Grijalba, presidente del Comité de Recursos Naturales de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, tiene audiencias la semana que viene para escuchar planteamientos sobre la estadidad (anexión), que es la desnacionalización de Puerto Rico, la independencia y la libre asociación, que representará el académico Rafael Cox Alomar.
La audiencia del Comité de Recursos Naturales de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, que será virtual debido a la pandemia del Covid-19, está prevista para el viernes próximo al mediodía.
“Hay ambiente en Washington para hablar del estatus de Puerto Rico, para hablar de un proceso en que se escuchen todas las cosas. No puedo culpar al vicepresidente Biden por su comentario; aunque en principio a algunos les haya chocado eso, es la primera vez que un candidato presidencial expresa su sentir y reconoce que sea un proceso vinculante”, dijo la alcaldesa de San Juan, quien ha estado activa en la campaña electoral estadounidense con el senador Ed Markey, de 71 años, quien evitó ser desplazado en primarias demócratas por el congresista Joe Kennedy, de 39, primero de la dinastía en sufrir una derrota electoral en Massachusetts.
Cruz Soto, quien no consiguió prevalecer en las internas para la gobernación del Partido Popular Democrático (PPD), ha sido reclamada ahora por la congresista Verónica Escobar (Texas), una contestataria a los desmanes de Trump, para que participe en su campaña de manera virtual, lo que ha acogido con satisfacción ante la realidad de que “los inmigrantes tienen que pagar en Estados Unidos para tener asistencia, lo que afecta por ejemplo a mexicanos, dominicanos y haitianos”.
“Para que nos tomen con seriedad tenemos que integrarnos a la lucha de la gente de allá; mi recomendación al PPD es que tiene que asumir un rol mucho más asertivo en términos de la comunicación con el Congreso, lo que es importante para que haya otras voces. Nuestra única representante (Jenniffer González Colón) es republicana, que reduce la conducta de Trump al estilo”, dijo la alcaldesa capitalina al sostener que era predecible que el Partido Nuevo Progresista (PNP) cantara victoria “porque cuando uno está muy mal se agarra hasta de un clavo caliente”.
Aclaró que los fondos federales, proteger la educación, el desarrollo, equiparar el Medicaid y el SNAP (Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria) nada tienen que ver con la estadidad, de ahí que se muestre esperanzada con Biden, pues su compromiso con un proceso vinculante no viene del propio candidato presidencial, no de un asesor.
Yulín, cromo prefiere que la llamen por llevar ese segundo nombre en honor a su abuela materna Yulín Vega, quien vivía en Guánica, precisamente por donde invadió el ejército de Estados Unidos el 25 de julio de 1898, recordó que “no fue hasta 1938 cuando nace el PPD, que comienzan a cambiar las condiciones de vida de los puertorriqueños”.
“Nunca es creído en la política que apela a los instintos más bajos y al miedo, la política de los anexionistas es apelar al miedo, dice mucho de lo que ellos creen de los puertorriqueños. Una de las cosas que uno tiene que pensar, cuál es el efecto de la estadidad con los impuestos. Sí, hay un efecto en el Comité Olímpico de Puerto Rico, hay una cuestión en lo económico, hay un desarraigo”, afirmó quien aspira a “tener dos pasaportes en equidad jurídica” con Estados Unidos.
Destacó que muchos de los problemas de Puerto Rico, como la eliminación de las empresas 936 del Código de Rentas Internas Federal o la imposición de la Ley Promesa con su Junta de Supervisión Fiscal (JSF) ha sido el resultado de acciones conjuntas de los demócratas y los republicanos.
“El boricua que está allá reconoce la importancia de su identidad cultural”, dijo antes de tararear “Mamá Borinquen me llama, este país no es el mío”, poema hecho canción de Virgilio Dávila (1869-1943), que enarbolan los puertorriqueños en Estados Unidos.