Pareidolia

Creativo

Yo no estoy loca. Si hay algo que tengo claro es que no estoy loca, aunque veo rostros y figuras por todos lados. Llegué a pensar que había enloquecido cada vez que salía al patio a mirar el cielo.

No podía explicar por qué las nubes formaban los rostros de mis perros. Cada día había una cara diferente y fue así como dejé de sentirme sola. Comencé a experimentar una inmensa alegría desde que me acompañan: Sisy, El Duque, Mayita la del Río, Mancha, Romeo, Juliet, Sidney, Lichy, Imán, Chispita, Yara Prohibida y hasta El Gordo, asoma su cara.

Ellos me sonríen y saludan desde el infinito. En las montañas que bordean mi hogar empecé a ver los semblantes de mis seres amados y no podía comprenderlo. De nuevo, pasó por mi mente la locura. Después, los rostros se revelaban en la parte delantera y trasera de mi auto. Los focos se tornaban en grandes ojos.

Confieso que llegué a asustarme cuando mi reloj despertador se transformó en una cara triste, mientras que, en la taza de café, aparecía una sonriente. Sentí terror un domingo cuando me preparé dos tostadas y se me quemaron. De pronto, en una de ellas vi la faz del demonio que me miraba molesto. Desde ese momento, he llegado a pensar que me encuentro en una realidad paralela