(San Juan, 1:00 p.m.) El Partido Nuevo Progresista (PNP), es una maquinaria política de la cual no se puede uno fiar. Siempre viven en la conspiración y tienen siempre un truco pendiente de ser manifestado. Ahora, la tribu de Pedro Pierluisi, ha traído al depuesto gobernador de la isla, Ricardo Rosselló para que se pasee hasta por la Fortaleza. Esto habiendo participado en la candidatura de otros amigos, incluyendo la del gobernador. ¿Sera que en el 2028, el PNP quiere volver a traer a Rosselló a la vida política en la isla? Revivir la figura de Rosselló es un acierto o desacierto. El PNP la busca para cultivar a los adultos mayores que confían en la marca, aunque no en el conductor. Los Rosselló tienen en la generación de los mayores cierto abolengo político. Por lo que, parecería que el PNP lo esta rehabilitando. No para las elecciones del 2024, sino para las del 2028, de forma tal que puedan tener a otro candidatos político de ser necesario. Leer al PNP es poderlo neutralizar. La política hoy no solo requiere de poder participar en las elecciones, sino de derrotar dentro y fuera de las urnas a su oponente. A eso se dedica el PNP. A eso nos deberíamos de dedicar nosotros también, a neutralizarlos. Pensemos.
