Asesinan a abogado, teniente y mujer [asesinatos aparentemente vinculados en República Dominicana

Justicia Social

(San Juan, 10:00 a.m.)  La Policía Nacional informó este sábado que desconocidos ultimaron en diferentes actos violentos a un abogado y a un teniente coronel del Ejército de República Dominicana, en ambos casos aparentemente con el propósito de despojarlos de sus armas de fuego.

También declaró que se busca a los responsables de la muerte de una mujer cuyo cuerpo fue hallado con signos de violencia en un pozo séptico situado en los terrenos de la compañía donde laboraba.

Las víctimas son el abogado Félix Alberto de Jesús (Moraito), de 55 años; el teniente coronel del Ejército Nacional,  Enrique Portes Díaz; y  Paula Santana Escalante, de 23 años.

El jurista recibió un disparo en la cabeza la tarde del jueves 22 de febrero, cuando se desplazaba por la autopista 6 de Noviembre, vía que comunica la región Sur  con Santo Domingo, y se detuvo a comprar una cepa de plátano para sembrarla en su finca cuando fue sorprendido por dos antisociales.

Por igual, desaprensivos le quitaron la vida al oficial superior Enrique Portes Díaz. El hecho ocurrió el martes 20 de febrero en Hato Nuevo del sector Manoguayabo, en el municipio Santo Domingo Oeste. El soldado, que  fue impactado por un proyectil en el abdomen sin orificio de salida. estaba adscrito a la Primera Brigada de Infantería, en el municipio de Pedro Brand. La acción criminal fue con intenciones de robarle, no logrando su objetivo.

Con relación a los dos primeros eventos, la institución identificó a los supuestos responsables como los dominicanos Winston Yeremi de la Rosa, alias Cara de Muñeca y/o El Ñato; Martin Noel Jean; el haitiano Keuri Batista Fenelus (Papi Chuki) y un cuarto apodado “Chiquito”.

De acuerdo con la investigación de la uniformada, los prófugos conforman una banda que se le atribuye múltiples hechos delictivos.    

Agregó que los agentes del orden amplían las acciones de persecución de los presuntos responsables, para capturarlos y someterlos a la justicia.

En cuanto a la joven Paula Santana Escalante, los investigadores hicieron un levantamiento en el lugar donde fue titado el cuerpo para dar con el o los responsables del crimen.

Previo al hallazgo del cadáver, dos días antes la dama fue declarada como desaparecida por los familiares, que piden apresar a los autores.

Los agentes tratan de localizar a un compañero de trabajo que constantemente la acosaba. La acción de hostigamiento se lo hizo saber la víctima a la familia y a ejecutivos de la compañía.

El vocero de la Policía Nacional, coronel Diego Pesqueira, informó que varias personas que laboran en el lugar donde trabajaba la fenecida, son interrogadas por sospecha de vinculación con el asesinato.

Santana Escalante trabajaba en la empresa de zona franca Integer Holdings (que fabricaba dispositivos médicos para pacientes cardíacos) para poder cubrir los costes de esos estudios. Le faltaba menos de un año para culminar el curso de auxiliar de vuelo o azafata, que había iniciado con el propósito de sacar adelante a su madre, Johanny Escalante.

El más grande anhelo de ella, que vivía en el sector Riviera del Caribe, en Santo Domingo Este, era montarse en un avión y viajar a todas partes de mundo. Para cumplir ese deseo, sacó por primera vez su pasaporte antes que sus hermanos mayores.

Su hermana Jeranny Santana Escalante, de 26 años de edad, la describe como “una niña inteligente que tenía un desempeño que ningunos de sus otros hermanos y sabía hablar hasta inglés. Era una niña feliz, con mucho deseo de superación y metas. Era excelente tía, loca con sus sobrinos… Todos los caprichos se los concedía.

Previo a su desaparición, hace unos pocos días había compartido con los dos hijos de Jeranny, momento del que solo queda una grabación. Ella contó que Paula se los llevó para su casa, porque vivía sola.