Ingredientes:
2 rodajas de salmón
1 limón
Escamas de sal
Para hacer el salmón a la plancha, utilizaremos siempre pescado fresco, a ser posible sin congelar. Calentaremos la plancha a fuego medio-alto, echaremos las dos rodajas de salmón con cuidado, y sobre éstas pondremos unas escamas de sal. Para que no se nos seque, pondremos mucho cuidado en darle la vuelta a las rodajas de salmón cuando estén hechas por una cara.
Es importante no darle más de una vuelta a las rodajas de salmón. Normalmente, con entre 5 y 7 minutos por cada cara, suele ser suficiente. Mientras el salmón a la plancha se cocina, regaremos cada cara con un el zumo del limón.
Serviremos el salmón bien caliente, acompañado, si se quiere, con un poco de mayonesa casera.
Nota del autor
Una de las ventajas de cocinar el salmón a la plancha, es que no requiere usar aceite, ya que el propio salmón libera sus propios aceites grasos, que además son cardiosaludables por su contenido en Omega 3.