Durante esta semana, la ministro de justicia de Francia Christiane Taubira hizo unas declaraciones públicas a los efectos de que la República de Francia resarciera a los descendientes de esclavos, en los países que estuvieron y/o que están bajo el dominio de Francia. Entre las propuestas estaban la entrega de tierras y la creación de un sistema de políticas públicas en pro de los afro descendientes.
La ministro Christiane Taubira es una mujer negra, con orígenes en el Caribe, específicamente en la Guyana Francesa. En la política francesa ella se ha destacado como una líder no convencional de izquierdas, igualmente no está afiliada a los intereses de los partidos convencionales. En este sentido, en una ocasión ella llevó una campaña por la presidencia de ese país, como candidata independiente. Mientras estuvo en la legislatura de Francia, logró que se aprobara legislación que denunciaba la práctica de la esclavitud atlántica y también en contra de crímenes contra la humanidad. Como si fuera poco, también fue diputada de la Unión Europea. No cabe duda, que estamos ante una jurista y político de primer orden, en el ámbito europeo.
Cabe mencionar, que esta propuesta está hecha en un período donde Francia se encuentra inmersa en una recesión económica, producto de la Gran Recesión. Por lo que es aún más meritoria. No es una cuestión de dinero o de capitalismo, más bien de justicia.
La idea de llevar justicia a los afros descendientes en América y en África, es por decir una palabra revolucionaria. En mi opinión, es increíble que ninguna otra potencia europea haya decidido resarcir a los descendientes de los esclavos que fueron traídos violentamente desde África. Se ha esrito mucho sobre lo horrendo de la esclavitud y de sus consecuencias morales, sociales y económicas para África y para América, pero pocos hablan de resarcir los innegables daños. Recordamos que en la actualidad los afro descendientes de América tienen un elemento común que es la pobreza y el discrimen, según han señalados varios expertos.
En el Caribe, donde la población de afro descendientes es mayor que en otros países, por lo que esta noticia tiene un peso y un significado distinto para nosotros. Es muy impactante y meritorio, que la hija del Caribe, de Guyana; descendiente de esclavos, esté desde Francia abogando por todos nuestros derechos.
Es un ejemplo que deberían seguir España, Holanda y Gran Bretaña para el Caribe.