Nueva Gobernanza para rescatar al país

Política

altCuando en las elecciones del 2012, un grupo de compañeros y compañeras nos propusimos impulsar un Frente Amplio, lo hacíamos por un profundo cansancio con las fuerzas políticas tradicionales que no lograban transformar lo político en bienestar colectivo. Anquilosados los viejos partidos en viejas prácticas, pensábamos como inventar otro país que fuera más democrático y donde la gobernanza fuera una que permitiera mayor participación directa del pueblo.

Parece trillado, pero lo que se pedía era otro tipo de democracia donde los “más” pudiéramos opinar e intervenir. Sabemos que un objetivo para muchos era lograr sacar del gobierno a la última facción dirigente del Partido Nuevo Progresista, la cual demostró ser imprudente en cuanto a gobernar con la voluntad del pueblo. La victoria del Partido Popular Democrático, bajo la dirección de Alejandro García Padilla, se da en este contexto de luchas sociales y molestias populares contra algunos de nuestros gobernantes.

A seis meses en el poder de la nueva administración, ¿cómo vemos la nueva gobernanza? De mi parte frio y caliente. Hay algunos políticos que han hecho una diferencia pues se han sentado a escuchar a los no-poderosos. Pensemos en Luis Vega Ramos y Ramón Luis Nieves, ambos propulsores de los proyectos pro-equidad. De igual forma pensemos en la última apuesta de la alcaldesa Carmen Yulín Ortis de democratizar el presupuesto del Municipio Autonomo de San Juan, en algunas comunidades donde será estas las que, bajo un fondo básico, determinen como gastarlo.

Pero es en lo económico donde el nuevo gobierno está fallando profundamente. El equipo económico del gobernado, pese a todos los esfuerzos loables, no está logrando articular un proyecto sanador para el país. Ante esto, pregunto, ¿y si cambiamos la fórmula de gobernar en lo económico, sería viable un nuevo impulso de desarrollo económico? Pensemos en un proyecto que integre todas las voces sociales, y que las escuche y logre articular desde esos saberes una reacción que cree esperanza.

Yo apuesto que con una gobernanza más democrática, y escuchándonos a todos y todas, podríamos intentar echar este país adelante. No es algo trillado. Es en serio. Toda respuesta desde unos pocos, no nos sacará del abismo económico. Apostemos a una nueva gobernanza.