Caribe busca reconocimiento de efectos negativos de la esclavitud

Política

Bridgetown- El gobierno de Barbados consideró ayer que la reparación solicitada a Europa por los crímenes de la esclavitud busca, más que una compensación económica, el reconocimiento del impacto de este flagelo en los pueblos del área.

Durante el lanzamiento de la Temporada de la Emancipación, el ministro de Cultura Stephen Lashley afirmó que la admisión por parte de las antiguas colonias de los daños ocasionados por la esclavitud es una forma de avanzar en el combate a la discriminación por motivos raciales.

"No creo que haya que avergonzarse por el tema de la reparación. Creo que, tanto para Barbados como para los demás países del Caribe que han surgido de la esclavitud, muchas de las problemáticas a las que nos enfrentamos hoy están vinculadas con esa experiencia", dijo.

El ministro opinó que la pobreza endémica y la falta de desarrollo que asola a los países del área tuvieron su origen en las políticas de explotación y discriminación implantadas por los europeos desde el siglo XVI.

Explicó, además, que su gobierno puso en marcha un grupo de trabajo sobre el tema, que será llevado a la agenda internacional a partir del debate en Naciones Unidas.

La Comunidad del Caribe (Caricom) aprobó recientemente un plan de 10 puntos para reclamar a los Gobiernos de Reino Unido, España, Francia, Portugal y los Países Bajos una compensación adecuada por la esclavitud y genocidio perpetrados contra los pueblos originarios.

El organismo regional celebró en septiembre pasado una reunión conjunta en San Vicente y las Granadinas para debatir la estrategia a seguir para reclamar dicha compensación.

La demanda obedeció a un acuerdo de la cumbre del ente celebrada en Puerto España en julio 2013, en la que los líderes regionales acordaron establecer comisiones de reparación en cada uno de los 15 países miembros del bloque.

Aunque la cifra es debatida, se estima que alrededor de 12 millones de personas fueron secuestrados en la costa occidental de África y transportadas en barcos negreros europeos hacia las colonias de América, entre los siglos XVI y XVIII, donde fueron sometidos a vejaciones y trabajos forzados.

A la Caricom la representa legalmente en su disputa la renombrada firma legal británica Leigh Day & Co, la cual logró en 2013 que Reino Unido reconociese haber torturado a más de cinco mil rebeldes de una guerrilla keniana en la década de 1950.

pgh/lio