El neoliberalismo en la política de los EE.UU.: los Súper PACs

Voces Emergentes

altLos Súper “PAC” son un organismo vivo, que es capaz de brindar cientos de millones de dólares y dar luz a solo un líder estadounidense. Esta evolución de los nuevos súper “comités de acción política” (por sus siglas en español) ha alterado el curso de las campañas políticas, desde julio de 2010, tras el resultado de un caso en la corte federal conocida como Comisión Electoral.

Los súper PACs son comités políticos independientes que apoyan a un candidato, así sea con donaciones ilimitadas, normalmente son anónimas, de las empresas, los sindicatos o individuos. Estos comités políticos no pueden ni deben contribuir de una forma directa con un candidato, pero si pueden publicar anuncios que sean favorables a uno de los candidatos o que sean negativos sobre el oponente de su candidato. La mayoría de los anuncios patrocinados de los súper PACs son negativos y considerablemente liberales.

La decisión de la Corte Suprema hizo famosos a los Súper PACs, en enero de 2010. En el caso de los Ciudadanos del Tribunal de los Estados Unidos v. la Comisión Federal de Elecciones se tomó la decisión de que el gobierno no podría restringir el gasto de las empresas, los sindicatos y los otros grupos de las campañas políticas, refiriéndose a la Primera Enmienda donde defiende los derechos a los candidatos para que apoyen a quienes deseen. Esta decisión que tomaron los Ciudadanos Unidos, permitió que este grupo pudiese donar cantidades ilimitadas de dinero para las campañas políticas. Por otro lado, se desmanteló una ley de financiación de campañas de McCain-Feingold, donde se prohibía los anuncios de emisión y de dinero blanco en las campañas políticas.

Cuando nos referimos a términos legales, PACs se creó en búsqueda de una reforma para la financiación de campaña para los Estados Unidos. Podemos observar que en las democracias de otros países se utilizan diferentes términos para las unidades de gasto de campaña o los gastos en la competencia política. Por otro lado, a nivel federal de los Estados Unidos, una organización puede ser considerada PAC, cuando esta recibe $2,600 o más con el propósito de que pueda influir en una elección federal, de acuerdo con la Ley Federal de Campañas Electorales.

Por último, de acuerdo con el ámbito estatal, una organización pasa a ser PAC por medio de las leyes electorales del estado. Como podemos predecir, en Estados Unidos los candidatos ya no son “tan importantes” en una campaña presidencial. Es decir, como tenemos conocimiento ya de las leyes de financiamiento electoral, las mismas prohíben a las corporaciones que realicen donaciones directas en beneficios de un candidato. Los súper PACs, son quienes pueden sacar al aire anuncios que influyan en la opinión de los votantes sin ellos tener que revelar su identidad.

Considero que esta forma en que influyen estos comités de los súper PACs es una manera muy injusta de llevar un procedimiento electoral y más cuando se trata de una elección donde un líder va a presidir un país o una nación entera. O sea, este término de los “Súper PACs” se podría hasta considerar como un desastre para los que quieran tener la oportunidad de aspirar a una candidatura.

Es decir, supongamos que cierta persona quisiera poder tener la oportunidad de aspirar para la presidencia de los Estados Unidos, y hay otro cierto candidato del cual a los miembros del “Súper PACs” puede convencer más con su candidatura. Obviamente, estos miembros del “Súper PACs” con el poder que tienen, o sea, el “DINERO”, van a derrotar al otro y por el otro candidato no tener los recursos suficientes para poder aspirar a la presidencia, no va a tener la oportunidad de ser conocido por todos los votantes. Es una “ayuda” nefasta esto de los “Súper PACs”. No, no ayuda en nada para el desarrollo de la democracia de los Estados Unidos y/o en una candidatura. Esto es un producto del capitalismo, es injusto para los demás.

Los “Súper PACs” no deberían tener el poder que tienen para realizar las cosas que hacen por un candidato. El poder no puede tratarse siempre del dinero, el dinero no debe ser, ni lo es todo. Es injusto para muchos, que solo el que tenga más dinero es el que tiene más poder. Esta manera de liderar, tiene que acabar. Es injusto para nosotros y para ellos, los de la clase media (casi pobre) que por no tener, quizás, los recursos para poder realizar una acción, tenga que ser siempre el dinero, el que compre todo; presidentes, gobernadores, prensa, votos, jueces, policías, etc.

En la política puertorriqueña, vemos como estos grandes poderes influencian a través de los medios de comunicación. En nuestro caso, este tipo de influencia lo podemos ver en la prensa escrita o e los sistemas de información mediática. Si nos ponemos a analizar, los principales periódicos de la prensa corporativa del país participan ya de la lógica de los Súper PACs.

En los últimos años, vemos como la prensa corporativa y los sistemas de información mediática, han tomado un giro más pro-partidista hacia uno de los principales u otro de los principales partidos políticos de la isla. Así podemos ver evidenciados cómo el dinero puede tomar el control e influenciar sobre la opinión pública, así teniendo un acceso directo al electorado.