Muñoz Marín [reinventado] es Wanda Vázquez Garced

Voces Emergentes

altPara los ilusos es simplificar la coyuntura actual de Puerto Rico. Simplificarlo es decir que simplemente somos una colonia, y que Washington ni el gobierno local territorial tienen la capacidad de resolver los problemas de la población. Que son un bonche de corruptos y delincuentes. Dicho esto, ya no hay nada más que hablar.

No es cierto. el país, como el mundo, es un lugar mucho más complejo, que merece le prestemos atención seria. Merece repensarlo todo desde un paradigma nuevo o por lo pronto distinto al existente.

Luis Muñoz Marín [líder o gobernador de Puerto Rico de 1938 a 1964], definió la modernidad y modernización del país. Su mirada del estado, colonial y con pobres poderes, nos ha definido hasta el día de hoy. El estado, en la lógica muñocista, es un locus de poder para el beneficio de la población. El país que vivimos, pese a las políticas neoliberales, aún guarda un imaginario y narrativa que es muñocista. Es decir, uno donde el estado es el centro del bienestar para la población, y donde sus instituciones son las líderes de la transformación de la vida de su población.

Pero desde la década de 1980, ese estado benefactor, colonial y territorial, inició un proceso de mutación hacia un política macroeconomía neoliberal. Por lo tanto, las primeras privatizaciones, como parte de esa nueva política neoliberal, se dieron en el epicentro del sistema de salud pública del país, desarrollado por Muñoz Marín en la década de 1950. De igual forma, la descentralización del sistema público de educación, a nivel escolar y universitario, tomo vuelo también en ese momento con la espiral de tener más universidades privadas y escuelas privadas, que necesidad social. Estas, las universidades, subvencionadas por el gobierno federal, y no por el estatal, con el impacto en el inicio de la desmantelación de la universidad pública, la Universidad de Puerto Rico (UPR). ¿Hay necesidad de ir a la UPR, si hay tantas opciones privadas? [escucho a Jay Fonseca decir esto continuamente hasta el día de hoy].

Pero ese proceso, que se había acelerado a partir de la debacle económica en el 2014 [con la introducción masiva de medidas neoliberales], adviene a un proceso de contención hoy bajo el liderato de Wanda Vázquez Garced. ¿Qué cómo? Asi como lo escucha. Es curioso que como diría el querido Cheo Feliciano, "de cualquier maya sala un ratón". Hoy Wanda Vázquez Garced nos sorprende, sobre todo al analizar desde "otras" narrativas e imaginarios su conferencia de prensa ofrecida en el día de ayer, sábado de gloria, en la cual nos anuncia el nuevo toque de queda.

Con su mirada estadista-soberanista-independentista, Wanda Vázquez Garced en espacio de un mes, desde el inicio de la pandemia, ha respondido como toda buena republicana, lo cual ella no es ni es [ella es un nie clásico], que en momentos de crisis, se convierten en socialdemócratas y aceptan las posturas keynesianas de la década de 1930 en los EE.UU. Es decir, hacen que en medio de la crisis, el estado tenga un rol prominente. En Puerto Rico, esas medidas pueden ser leídas a su vez, desde una narrativa soberanista e independentista.

Con este cuadro, Wanda Vázquez Garced, ante nuestros ojos en un mes ha adaptado medidas increíbles para una persona estadista [salvo que sea independentista de closet]. Entre otras:

* Cerró los puertos, aéreos y náuticos, y los militarizó para proteger a la población boricua.

* Desarrolló un plan de acción basado en fondos estatales, prescindiendo de fondos federales, que hasta el día de hoy, luego de un mes, es el único que tenemos. No ha habido fondos federales, alguno, en operación en Puerto Rico hasta el día de hoy.

* Cambió la narrativa del referente de modernización. Nuestro referente hoy es el CDC de Atlanta, pero también la Organización Mundial de la Salud (OMS), como "otras jurisdicciones", por decir otros países que no son los EE.UU. En otras palabras, Puerto Rico ha seguido por modelo en la pandemia, países soberanos y libres, como nunca antes lo había hecho. No ha seguido a la metrópoli.

* La gobernadora no se ha asesorado con ningún extranjero en este momento. No hemos visto un solo norteamericano o extranjero en ninguna de las conferencias de prensa que ha dado la gobernadora hasta el día de hoy. Esto es un modelo Boricua, hecho por boricuas.

* Finalmente, nos interesa que todas las instituciones del estado, entre ellas la Universidad de Puerto Rico, la estación de televisión y radio WIPR y sobre todas las cosas, el Departamento de Salud, se han recompuesto y se han convertido en agencias u organismos esenciales para el bienestar de Puerto Rico. Difícil pensar en cerrar WIPR hoy; difícil pensar en desmantelar a la UPR; peor aún, difícil pensar que debemos de eliminar el plan de Mi Salud en lugar de fortalecerlo por vía del Departamento de la Salud.

En fin, que Puerto Rico es hoy, a 30 días de la pandemia, otro tipo de país. Un país gobernado y hecho por los boricuas que vivimos aqui (la ausencia de la diáspora ha sido significativa en este momento). Es momento de pensar el futuro del país de otra forma.

Los grandes perdedores: los que apuestan al cinismos y al sarcasmo, como periodistas tipo Jay Fonseca, entre otros, que no han aportado nada para mejorar la situación. Con sagradas excepciones tipo Luis Guardiola, que han hecho un esfuerzo por entender las estadísticas de esta pandemia.

Es momento de repensar el país en otra dirección. En 30 días hemos inventado una nueva narrativa, que tiene algo de muñocista, pero realmente hablando es de corte Wandista. ¿Será Wanda Vázquez Garced la que le pida a los EE.UU. la independencia de Puerto Rico?