En ausencia de cine, las plataformas digitales. En el futuro uno espera volver al cine, para sentarse en una sala oscura donde el cine de suspenso provoca mayor temor. En el hogar, hasta el gato maúlla por comida, lo cual le recuerda a uno que la película se puede detener.
En fin, The frozen ground (Dir. Scott Walker, EE.UU., 2013) es un tipo de filme que te cautiva. Se trata de una historia verídica del asesino en serie, de mujeres jóvenes, misogenista por demás, en Alaska. Es un caso de horror. Pues 17 de sobre 40 mujeres fueron identificadas por Robert Hansen (John Cusack) luego que el policia investigador Jack Halcombe (Nicolas Cage) investiga el caso. Eventualmente Hansen/Cusack confiesa y la historia es horrible.
No obstante, Walker un director de cine australiano, quien se lanzó al estrellato a partir de esta película, su opera prima, rinde un homenaje a todas las mujeres que desaparecieron en Alaska en un periodo de 20 años que duró la historia de este asesino en serie. La película tiene un reparto de primera, y en la actuación de la única víctima sobreviviente del asesino en serie, la joven Cindy Paulson (Vanessa Hudgens), quien desarrolla confianza con el policia Halcombe/Cage, y a partir de ahí y de forma muy emotiva, se comienza a resolver la trama.
Se trata de un homenaje-filme [a las víctimas] muy fuerte pero sensible [a las víctimas]. La narrativa de contar lo que pasó es muy importante. En esta medida, al final del filme, Walker expone la historia de cada una de las mujeres cuyos cuerpos fueron encontrados (en verano) en fosas cavadas durante el invierno bajo la nieve. Aparecieron muchas, otras nunca han sido encontradas.
No obstante, la justicia se impuso, la jurídica y Hansen/Cusack cumple 461 por cuatro asesinatos que se pudieron probar. El resto, es cambiar una cultura misogenista que ve en el abuso contra la mujer algo posible. La película nos sensibiliza sobre el porque oponernos al patriarcado y a la violencia de género. Buena película. Saquen tiempo. Adelante Walker, adelante.