Hoy hace 31 años de la muerte de un querido y admirado amigo al que la revista Exégesis del Colegio Universitario de Humacao dedicó una edición especial en la que su director, el poeta y ensayista Marcos F. Reyes Dávila comienza diciendo: “Josemilio González (1918-1990) vivió siempre a la altura de los tiempos más difíciles. En su vida como en su obra combinó en todo momento la lucidez del crítico que arma y desarma la trama que produce los fenómenos más complejos con la sensibilidad del poeta solidario con las muestras más vivas de la integridad humana y con las causas justas más desfallecidas y sin esperanzas”.
Esa edición especial de Exégesis incluye textos de José Luis Ramos Escobar, Francisco Matos Paoli, Angel M. Encarnación Rivera, Edgar Quiles Ferrer, Julio César López, José Ferrer Canales, José M. Torres Santiago, Carlos Rojas Osorio, Amalia Rivera, Lydia Milagros González hija de Josemilio y la despedida de duelo en la Torre de la Universidad del entonces Rector del Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico Juan R. Fernández. La segunda parte de esta excelente Edición Especial de Exégesis abarca textos inéditos de Josemilio: poemas, cuentos y ensayos.
Disfruté de la amistad de Josemilio desde que en ocasión del Centenario del Grito de Lares me invitó a leer varios textos de la conmemoración en el Centro Cultural de la histórica población a la que tuve el privilegio de viajar en unión a Nilita, Juan Martínez Capó y el propio Josemilio. Me entristeció mucho su muerte aunque, como dijo Martí: “La muerte es una victoria, y cuando se ha vivido bien, el féretro es un carro de triunfo. El llanto es de placer, y no de duelo, porque ya cubren hojas de rosas las heridas que en las manos y en los pies hizo la vida al muerto. La muerte de un justo es una fiesta en que la tierra toda se sienta a ver como se abre el cielo".
Esta Edición Especial de Exégesis en honor a Josemilio debía volverse a imprimir para beneficio de los que no tuvieron la oportunidad de leerla en aquella ocasión.
