La organización Kilómetro Cero, que hace monitoria cívica de las acciones de uso de fuerza y represión de las policías en Puerto Rico, hizo hoy un llamado a la nueva administración pública a que asuman las medidas de rendición de cuentas y las reparaciones necesarias ante la violencia policial ocurrida en el Verano del 2019.
El llamado se hace tras la publicación del informe del monitor federal de la Policía esta semana, donde se revela que la Policía de Puerto Rico no hizo investigación alguna ni tomó medidas disciplinarias contra los agentes que abusaron de la fuerza y agredieron injustificadamente a decenas de personas durante la jornada de protestas.
“Nos volvemos a indignar porque, ni siquiera con una reforma de la Policía existe rendición de cuentas en esa agencia”, dijo Mari Mari Narváez, directora ejecutiva de la organización cívica. “Nos sentimos traicionadas nuevamente por un sistema de impunidad que parece impenetrable y, sin lugar a dudas, hemos perdido ya la confianza en la reforma de la Policía”.
En el informe del monitor John Romero, este revela que su oficina “no ha visto ni una sola investigación (en la Policía) sobre el uso de la fuerza en relación con estos incidentes (del Verano 2019)”. En los casos donde hubo, según él “claras violaciones por parte de los agentes, la Policía debería haber hecho todo lo posible por identificar a los agentes que realizaron un uso excesivo de la fuerza. Los agentes que fueron identificados deberían haber sido sancionados en consecuencia... Este es un tema de gran preocupación, ya que se esperaría que durante el tiempo transcurrido desde las protestas de julio de 2019, la Policía hubiera investigado esos hechos y elaborado los informes correspondientes… La Oficina del Monitor ha llegado a la conclusión de que la Policía no documentó, informó o investigó adecuadamente todos los casos en los que se utilizó la fuerza".
En cuanto al informe del Monitor, Kilómetro Cero también mostró preocupación por la forma como, en ciertas instancias, su equipo resta importancia a golpizas y disparos con balas de goma a corta distancia y por la espalda contra manifestantes que ya huían de la escena tras haber recibido gases lacrimógenos.
“Lo que el Monitor llama ‘casos aislados significativos’ es un eufemismo y una contradicción”, añadió Mari. “Esos casos de abuso contra personas que ejercen su derecho fundamental a la protesta son exactamente los mismos que llevaron a la Policía de Puerto Rico a una Reforma. Los problemas sistémicos nunca son aislados y si la Policía no ha demostrado siquiera haber puesto en acción un mecanismo de rendición de cuentas como el propio Monitor lo señala, entonces no ha habido evolución alguna ni hay manera posible de caracterizar estos casos como aislados que, de hecho, son decenas según documentamos en ese momento. El monitor de la Policía también se equivoca cuando dice que la Policía mejoró su actuación durante las protestas de #WandaRenuncia en enero del 2020. En esa ocasión, en Kilómetro Cero, como hacemos siempre, documentamos los mismos casos de violencia policial con golpizas, gases lacrimógenos y balas de goma a corta distancia, que el monitor acepta pueden ser letales. Lo que pasa es que hubo menos participación y, por tanto, menos personas afectadas que en el verano del 2019. Construir una narrativa de excepcionalidad mientras se denuncia la absoluta inacción de la Policía en la rendición de cuentas y las reparaciones sólo abona a la impunidad histórica de la Policía de Puerto Rico. Aquí hubo personas que sufrieron daños, que todavía cargan traumas de esos episodios e innumerables personas fueron desincentivadas de ejercer su derecho a la protesta. La inacción habitual del tribunal federal en torno a estos sucesos violentos ampliamente documentados simplemente les repite una y otra vez a las personas agredidas, a quienes la Policía arrestó sin causa, que para ellas y ellos no hay Primera Enmienda, no hay Constituciones que valgan, no hay derechos ni remedios ni reparaciones. Para estas personas lo que hay es represión, agresión y violencia de Estado”.
Kilómetro Cero ha documentado ampliamente la violencia policial en Puerto Rico y continuará haciéndolo, además de exigir rendición de cuentas y reparaciones contra la violencia de Estado. En el caso de los sucesos del verano de 2019, la organización trabajó conjuntamente con el Colegio de Abogados y Abogadas de Puerto Rico, la Unión Americana de Libertades Civiles, Amnistía Internacional PR, Brigada Legal Solidaria y el Instituto Caribeño de Derechos Humanos.
Kilómetro Cero es una organización sin fines de lucro que aspira a un Puerto Rico donde el Estado proteja la vida humana, las libertades y la dignidad en la búsqueda de la seguridad pública, para una sociedad más democrática y justa.