Ya lo dije, y me reitero: Steve McQueen es un director de cine a seguir. De origen caribeño, entre Grenada y Trinidad, nacido y criado en Londres, Inglaterra, y casado con una mujer holandesa, con la cual tiene dos hijos, este talento establecido dice cosas que hay que prestarle atención. Hay que seguirle, como se le siguen los pasos a otros actores y actrices, como Michael B Jordan, Jordan Peele, y Lupita Nyong´o.
McQueen promueve el desarrollo de la historia de la comunidad afrodescendiente en Inglaterra. Esto lo hace en la serie de televisión Small Axe, la cual aborda capítulos sobre distintos aspectos de la vida de los inmigrantes caribeños y africanos, a suelo británico.
Lovers Rock es una gran película sobre la cultura caribeña, y en particular la del baile. Es un hermoso homenaje al Reggae, al baile y a la cultura de los barrios negros, trabajadores y pobres de Londres. En esta medida, es un trabajo muy bien pensado, donde todo es parte del guión, y sobre todas las cosas, la película transita en diálogos de lenguajes no verbales.
Tal vez la parte mejor lograda de la película, son dos momentos, uno de naturaleza sensual erótica, y otro de naturaleza combativa. Ambos son expresiones de baile, uno entre parejas, y otro entre hombres. Pero son escenas valiosas de un dialogo no hablado sobre la cultura afrocaribeña.
Es momento de detenernos y ver la serie Small Axe. Ahora, bien Lovers Rock es hermoso homenaje al baile. A verla y bailar al buen ritmo del reggae. Adelante Steve McQueen, adelante.