(San Juan, 12:00 p.m.) Las elecciones especiales vienen el próximo 16 de mayo, es decir en menos de cinco días. El PNP augura que con un plebiscito donde obtuvieron poco más del 52 por ciento de los votos emitidos, ahora pueden elegir a seis delegados a Washington, a razón de $160 mil dólares al año, pese a que solo vaticina una participación de menos de 100 mil electores. ¿En serio? Se trata de un nuevo capítulo de “En tierra de truqueros”.
Bajo la campaña mediática de que escogemos nuestros delegados congresionales, la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) al amparo del Partido Nuevo Progresista (PNP) promueve información engañosa. Es decir, nosotros vamos a darle trabajo a unos cabilderos a nombre del gobierno de Puerto Rico, pagado con fondos estatales, que carecen de legitimidad ante el propio Congreso federal, y sobre todo ante casi la mitad de la población electoral. Pero “en tierra de truqueros” todo es posible.
Dentro de esto, los lamentables sucesos de la semana pasada, entre asesinatos y feminicidios, han logrado opacar toda campaña contestataria a la prédica del gobierno, del PNP, de la CEE y del gobernador de turno, Pedro Pierluisi. Todo el mundo está en negación o en silencio, pero nadie se ha dado cuenta que ellos siguen con su embeleco. Seguimos “en la tierra de truqueros”.
Finalmente, es momento de, aunque sea de forma tardía, impulsar algún cuestionamiento al proceder del partido en el gobierno central y a sus interlocutores. No es posible que nos sigan vendiendo trucos, como si fueran sueños, en Puerto Rico. Pensemos.