Monster o la segunda oportunidad que todos le pedimos a la justicia

Cine caribe

Se trata de un filme bonito, que introduce un tema clásico: la justicia.  La justicia como un relato contado a partir de un interlocutor no tradicional: el joven coacusado que descubre lo compleja que es la justicia, y donde en todo momento, éste indica que no fue parte de un asesinato. Simplemente un sujeto de a pie, que por allí pasaba. Que por allí pasaba, tan sólo así, tan sólo pasaba.

Monster (Dir. Anthony Mandler,  EE.UU., 2018) es un filme muy interesante basado en la novela del mismo nombre de Walter Dean Myers.  La película versa sobre un joven talentoso, Steve Harmon (Kelvin Harrison, Jr.) quien   se cría en un hogar de clases medias en Harlem, y asiste a una de las mejores escuelas creativas de la ciudad.  Se destaca como fotógrafo y cineasta en ciernes.

En el mundo dónde se cría Steve/Kelvin, interacciona con todas las personas del barrio, y allí convive, a su ritmo y estilo.  En el filme él transita por el primer beso, por la creatividad sin límites, y más que nada con un barrio, donde hay gente de todos los colores y calibres. Es una película muy bien contada, donde el personaje central, nos va narrando como se siente una vez es acusado y convive en la cárcel con otros seres humanos que tienen otro proyecto de vida, distinto a él que nació para ser fotógrafo y cineasta.

La película evoca otras películas, todas donde el sistema justicia criminal, incluyendo la cárcel, lo presos, los pobres y negros.  Pienso en Devils Advocate (Dir. Taylor Hackford, EE.UU., 1997), Dekalog (Dir. Krzysztof Kieślowski, Polonia, 1990), Juan Meléndez 6446 (Dir. Tito Rosario, Puerto Rico, 2009), El Beso de la mujer araña (DIr. Héctor Babenco, Brasil-EE.UU., 1985).  En fin, es una película muy linda e interesante.

En fin, deben verla. Se encuentra en las redes sociales.  No es reciente. No obstante, es contemporáneamente, importante.