Michelle Hernández [seguridad de Luma] desmiente a Pierluisi y González

Justicia Social

(San Juan, 9:00 a.m.) Mientras el gobernador Pedro R. Pierluisi y la comisionada residente de Puerto Rico en Washington, Jenniffer González Colón, se aventuraron a priori a sugerir la posibilidad de sabotaje en el fuego del transformador de la subestación de Monacillos, que dejó sin energía eléctrica a unos 800 mil abonados de distintos municipios del país, la directora de seguridad de LUMA, Michelle Hernández de Fraley, prácticamente descartó esa posibilidad al decir que para entrar al área el empleado debe tener un número de control.

“En términos de seguridad, toda esa área, para poder entrar hay que tener un número de control. Ahora mismo estamos bajando todas las últimas semanas las personas que han tenido acceso a la subestación. Además de eso, hay cámaras por todo Monacillos, especialmente la subestación y tenemos agentes de ley y orden que están revisando las cámaras”, aseguró Hernández de Fraley.

Lo que podría considerarse un intento de distracción para encubrir la responsabilidad de LUMA Energy en cuanto a la misión de mejorar la debilidad infraestructural del sistema eléctrico del país y su encomienda de lidiar urgentemente con la situación en beneficio de los abonados al servicio considerado esencial, la realidad es que todo apunta a que parece haber sido una deficiencia de un equipo al cual no se le ha dado el mantenimiento requerido y donde existen claros indicios de obsolescencia.

La alarma sobre la posibilidad de sabotaje levantada por Pierluisi y González Colón tiende a denotar inevitablemente una carencia de objetividad al considerar lo relacionado a la situación actual con la privatización de la transmisión y distribución del sistema eléctrico y evaluar con ecuanimidad la función empresarial para lo cual se contrató a LUMA Energy.