Antonia, los pueblos no perdonan [Albizu, Filiberto, Sanes, tampoco]

Justicia Social

(San Juan, 1:00 p.m.)  En el día de hoy la Universidad de Puerto Rico anunció que en los actos de colación de grado de la estudiante Antonia Martínez Lagares, asesinada  el 27 de marzo de 1970, alegadamente por un policía en los disturbios universitarios en el Recinto de Rio Piedras, habrá de recibir su grado académico de forma póstuma.  Antonia Martínez Lagares se habría de graduar en mayo del 1970, de un bachillerato en pedagogía.  No lo logró hacer.

Los actos de graduación serán el próximo sábado 19 de junio, y será una ceremonia remota. No obstante, el grado de bachillerato se le habrá de conferir a la estudiante.  Para la comunidad de estudiantes que se gradúan en este momento, ese reconocimiento a lo mejor pasa desapercibido. No obstante, para la generación post Segunda Guerra Mundial y/o Boomers, reconocer a Antonia Martínez Lagares es un tema esencial y muy importante.

Lo que hoy promueve la UPR RP es un acto de justicia póstuma.  Es un evento singular, el cual tardó 51 años en consumarse. Dicho esto, hay que reconocer la importancia que tiene en la memoria histórica de país, reconocer a las personas de forma póstuma, lo celebramos. Ella no es la única.

Se suman a Antonia Martínez, Pedro Albizu Campos quien murió desaforado como abogado por parte del Tribunal Supremo de Puerto Rico.  También murió sin saber quien lo mató, Filiberto Ojeda Ríos, quien fue asesinado por un agente del FBI quien al día de hoy no se sabe quien fue. Igual destino tuvo David Sanes, asesinado por un piloto de avión de guerra de la marina de guerra de los EE.UU.  Este también espera por justicia y saber quién lo mató.

Por lo tanto, sigamos en la tradición que hoy abre la UPR, y celebremos a nuestros seres queridos del pasado, quienes merecen ser reconocidos.  Pensemos.