(San Juan, 9:00 a.m.) Evasivo y reticente, se mostró el presidente de LUMA Energy, Wayne Stensby, ante las preguntas formuladas en su comparecencia hoy a la vista pública de la Comisión de Desarrollo Económico, Planificación, Telecomunicaciones, Alianzas-Público Privadas y Energía de la Cámara de Representantes, presidida por Luis Raúl Torres Cruz.
Su actitud evasiva y reticente a contestar categóricamente las preguntas que los legisladores le formulaban llevó al representante Torres Cruz a decir que estaba “anonadado” con las alegaciones de desconocimiento por parte de Stensby sobre detalles operacionales de LUMA Energy en Puerto Rico, de quien dijo debe estar devengando un salario de más de $1 millón el año.
“Opera el sistema de transmisión y distribución de Puerto Rico y no llevan 17 días ni 20 días aquí, llevan un año montando su negocio pagado por la AEE con los chavos que paga el pueblo. Este señor se hace que no conoce la información”, argumentó Torres Cruz.
Adujo que Stensby ha tenido acceso a información de todo tipo en la negociación del contrato de Luma, por lo que “no es por desconocimiento, sino que no quiere contestar preguntas y una falta de respeto al pueblo de Puerto Rico”.
Insistió en que va a analizar la vista de hoy y a buscar las preguntas que se ha negado a contestar o dice que no sabe y vamos a ir al Tribunal bajo el Código Político y pedirle al Tribunal de Primera Instancia que se le ordene en un tiempo razonable que conteste las preguntas”.
Torres Cruz indicó que quiere conocer, por ejemplo, cuántas brigadas hay por pueblo, el número de celadores y cómo atienden las llamadas.
“No quieren dar la información porque están en incumplimiento del contrato”, dijo al acusar a la Autoridad de las Alianzas Público Privadas de no fiscalizar correctamente la ejecución de Luma.
Stensby estuvo durante la vista pública evasivo y reticente a contestar directamente y sin circunloquios las preguntas del representante Torres Cruz y demás miembros de la Comisión cameral hacían sobre la indagación acerca del cumplimiento empresarial con el contrato privatizador para administrar la red transmisora y distribución eléctrica mediante la alianza púbico-privada.
En la vista pública, Stanby contestó a preguntas del representante Torres Cruz que LUMA Energy está recibiendo en promedio más de veinte mil llamadas de abonados diariamente en días de semana, cuando en el pasado la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) recibía promediadamente no más de cuatro mil llamadas.
Cuando se le preguntó la razón de ese incremento de llamadas de los abonados, Stansby contestó que quizás se deba a que ahora se contestan las llamadas que se reciben, pero esa contestación suya no está acorde con las quejas de ciudadanos entrevistados por la prensa en la calle.
Cuando Torres Cruz insistió en que acaso no será porque hay muchas interrupciones (apagones) del servicio eléctrico en diferentes comunidades, Stensby intentó justificar la situación diciendo que aproximadamente el diez por ciento de las llamadas recibidas del público está relacionada a problemas con la energización eléctrica.
Stensby alegó en la vista pública de la Cámara de Representantes que necesariamente hay más apagones, sino que el incremento en el número de llamadas recibidas en sus centros de llamadas, de los cuales se negó a detallar por cuestiones de “seguridad” cuántos empleados laboran en ellos, obedece a que contestan el teléfono más eficazmente que la AEE.
No obstante, luego admitió, ante preguntas insistentes de varios representantes, o desconocer las causas de los apagones y las fluctuaciones de voltaje que asedian al país desde el 1 de junio, fecha en que el consorcio tomó las riendas del sistema eléctrico.
Más avanzados los trabajos de la Comisión en la audiencia pública, Stensby reconoció que ha habido “muchos eventos” de apagones en las últimas tres semanas y ofreció como ejemplo el incidente del 11 de junio cuando explotó un transformador en la subestación de distribución Monacillos. Indicó que la investigación del incidente sigue en curso y que un informe será presentado al Negociado de Energía de Puerto Rico en unas tres a cuatro semanas.
Cuando Stensby reconoció que el programa que se utiliza para divulgar las averías en la aplicación móvil de Luma Energy es impreciso, el representante por el Partido Independentista Puertorriqueño, Denis Márquez afirmó “estoy de acuerdo”, y de inmediato borró la aplicación del celular en plena vista.. Esta mañana el programa reflejaba 995 averías.
“El proceso manual con el que trabajamos hoy resulta en que haya una imagen imprecisa de clientes”, admitió Stensby. A lo cual Márquez reconvino que en ningún sitio del programa se le advierte al abonado que tenga cuidado con las cifras imprecisas que ofrece la aplicación.