Complacida la Junta no a la mediación [la colonia de los complacidos]

Economia Solidaria

(San Juan, 1:00 p.m.) La Junta de Supervisión Fiscal (la Junta), determinó hoy aceptar el Plan de Ajuste Fiscal (Ley 53-2021, conocido popularmente como el proyecto P. de la C. 1003), fue aprobado hace uno días.  El gobernador de turno Pedro Pierluisi, complacido. Pero también lo están, los presidentes de los cuerpos legislativos, José Luis Dalmau y Rafael “Tatito” Hernández.  Ahora bien, resulta que hoy el presidente de la Junta de Supervisión Fiscal, David Skeel, informó que ellos, la Junta, se sentían también complacidos. Es decir, no hay necesidad de hacer nada más, que no sea implementarlo.

La Junta, con el aval del gobierno de turno, ha logrado que el Plan de Ajuste de la Deuda, que es la política pública del gobierno de Puerto Rico, se aprobara. Ahora, viene la certificación por la juez Swain, ante el Tribunal de Quiebras federal en Puerto Rico. Una vez certificada por la juez el próximo 8 de noviembre, dicho plan, vendrán los días “inolvidables” para Puerto Rico.

La consecuencia inmediata de la decisión de la Junta en el día de hoy, es que suspende el proceso de mediación pautado para el 2 de noviembre.  En este sentido, la vía esta limpia para permitir que el proceso de restructurar la deuda pública de Puerto Rico se comience a implementar. Entre otros asuntos, la deuda tasada en $78 mil millones de dólares (la básica, sin intereses, ni penalidades) se reduce a $34 mil millones, en un 50 por ciento. Lo otro, que como forma de volver a pagar la deuda, Puerto Rico debe emitir  bonos, bajo sus obligaciones generales, de forma tal que con nuevas deudas, se paguen las viejas deudas.  ¿Fácil de entender, correcto?

Finalmente, lo que sí está en juego, es un desface en la gobernanza financiera del modelo colonial de Puerto Rico, el cual desde la Ley Foraker de 1900, nos impuso endeudarnos como forma de pagar nuestras obligaciones.  Por lo tanto, un argumento que merece más profundidad, en aras de construir otro país, es no permitir más deuda para garantizar los servicios públicos del modelo colonial de Puerto Rico.

Ahora bien, ¿cómo se sustituye la deuda con otro mecanismo de ingresos al erario público? Muy sencillo, convirtiendo al país en una plataforma de productividad, y donde la riqueza que se genere pague contribuciones. ¿Fácil?  Difícil de ponerlo en marcha en la relación colonial con los EE.UU.  Pensemos.