A beautiful day in the neighborhood o la lógica suave de la manipulación del capital conservador

Cine caribe
Todo lo que haga Tom Hanks hay que verlo. Es uno de los actores más consistentes de
su generación, y debe tener 10 filmes, por lo menos, que pasaran a la historia como
arte o productos de la cultura cult. Es un genio. Pero su última película, es por lo
menos, muy problemática, pese a que en apariencia, luce como inofensiva.

A beautiful day in the neighborhood (Dir. Marielle Heller, EE.UU., 2019) es un filme de
la vida cotidiana que explora las relaciones personales entre el hijo y el padre. Hasta
ahí, poco ocurrente. Pero, si lo hace a través de un programa infantil de televisión,
cuyo conductor uno no sabe si va o viene en nada, aunque todo es mucho más
complicado.

Tom Hanks personifica al conductor de programas infantiles Fred Rogers. Este será
entrevistado por el periodista venido a menos Lloyd Vogel (Mathew Rhys), quien trabaja
para la revista Esquire. El resto, cómo un periodista de asuntos políticos se enfrenta a
un conductor de programas infantiles, es algo extraño, pero se lleva a cabo de forma
sutil, y con mucha manipulación en los parlamentos.

En este proceso de entrevista y convencimiento, el conservadurismo neoliberal toma
control de la película. El periodista tiene reservas, pues viene de la vieja izquierda, no
obstante, el presentador, Rogers/Hanks, lo seduce para revertir los viejos y nuevos
valores de la familia clase media americana. Curioso, ¿no?

La película es una complicada, que nos recuerda otras en las cuales lo infantil se utiliza
para ofrecer un testimonio. Que cada cual decida. A mi me pareció una película difícil
de manejar, más que nada por la actuación extraordinaria de Tom Hanks/Fred Rodgers,
que nos invita a vivir dentro de los parámetros conservadores de la familia tradicional
americana.

Aunque es una película de hace unos años, ha vuelto a estar de moda. Es para toda la
familia, aunque a usted no le guste. Pero la ve a su propio riesgo.