Naciones Unidas, Naciones Unidas y el gobierno de Malí analizaron hoy detalles del despliegue de la llamada Fuerza Internacional de Apoyo a Malí (Afisma), creada por decisión del Consejo de Seguridad.
El tema ocupó el centro de una entrevista sostenida este domingo en Addis Abeba entre el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el presidente maliense, Dioncounda Traoré.
También conversaron sobre el establecimiento en Bamako de un equipo de apoyo del organismo mundial que respaldará a las autoridades en "el proceso de reconciliación y la restauración de la unidad nacional", según un comunicado emitido aquí.
En la reunión, Ban Ki-moon, sin mencionar la intervención militar de Francia en el país africano iniciada el pasado 11 de enero, saludó "el respaldo bilateral suministrado al gobierno de Malí en sus esfuerzos para contener los ataques de los grupos yihadistas".
La cantidad de efectivos galos suman casi cuatro mil, además de aviones y otros medios bélicos para combatir a los grupos armados islamistas que ocuparon el norte de ese estado africano.
La nota oficial difundida en la sede de la ONU en Nueva York, apunta que el dirigente internacional también abogó por la plena implementación de la resolución 2085 del Consejo de Seguridad que autorizó la formación de la Afisma.
Ese texto precisó que el objetivo del contingente, con liderazgo africano, es contribuir a la reconstrucción de la capacidad de las fuerzas de defensa y de seguridad de Malí, en coordinación con asociados internacionales, incluida la Unión Europea y otros países.
En su encuentro con Traoré, el titular de la ONU insistió en desarrollar un proceso político dirigido a elaborar una hoja de ruta para la transición hacia el restablecimiento pleno del orden constitucional "en paralelo con las actuales operaciones militares".
Ban Ki-moon y el presidente maliense participan en la capital etiope en una cumbre de la Unión Africana.