Elysium o la vida en el más allá, se origina en la mitología griega, y es recordada en la Odisea de Homero, como el paraíso. Algo así resulta con esta película, la segunda del realizador surafricano Neil Blomkamp (Johannesburgo, nacido 1979) que lo lleva nuevamente a ser tema de conversación global. En segundo filme, Blomkamp, director y guionista de Elysium, nos plantea como será la sociedad del futuro, la del 2154, cuando los que nos quedemos en la tierra seamos gente enferma, y los que lograron comprar su futuro viven en un satélite artificial de la tierra, en el cual todo es felicidad, inclusive el garantizar ser inmune a las enfermedades. El satélite, en comparación a la tierra, es literalmente el paraíso.
El director Blomkamp se hizo famoso con su opera prima District 9 (Africa del Sur, 2009), la cual sin lugar a dudas lo habrá de inmortalizar. No obstante en Elysium intenta batir su propio record, aunque a mi mejor entendido, se queda corto. Elysium es una gran película de ciencia ficción, no obstante la misma repite ideas ya elaboradas en District 9, como a su vez utiliza una serie de clichés provenientes de la historicidad de filmes de ciencia ficción. Sin lugar a dudas, su referente más importante, y al cual consistentemente hace alusión de forma subliminal, lo es Blade Runner (Rigdley Scott, USA, 1982/1992).
La historia se desarrolla en la tierra, donde los enfermos se quedaron varados. Un grupo de traficantes, una combinación de inmigrantes hispanos asistidos por el cartel de los Zetas, continuamente intenta infiltrar personas enfermas en el satélite artificial creado frente a la tierra. Este satélite, Elysium, es uno donde la gente vive bien y tienen buena salud. En particular porque toda residencia goza de una máquina, algo así como un CT Scan, la cual permite rectificar cualquier malfuncionamiento del cuerpo. Los terrícolas se infiltran en la tierra de los extraterrestres humanos, y utilicen la máquina y se curan.
Al final del filme, los infiltrados guiados por Matt Damon, se enfrentan a una Jody Foster expuesta de forma seductora, quien es la jefa de seguridad en el satélite. Los buenos, es decir, los que necesitan acceso a la máquina de la salud, al final se imponen, y Jody Foster, de una forma u otra es vencida. Es decir, la película que comenzó como un planteamiento interesantes, siguiendo una línea muy similar elaborada en Blade Runner, se degenera y termina como un thriller más de ciencia ficción.
Sin lugar a dudas que a Neil Blomkamp hay que prestarle atención. Es un joven director emergente, del sur, aunque desde el 1998 residente en Canadá, quien ha logrado combinar la sabiduría fílmica de países del norte, con su pasado de país sureño. Esta combinación se ve continuamente reflejada en sus dos películas al día de hoy. En particular en Elysium, la cual se desarrolla en el futuro, hay que prestarle atención que el ejército que comandará dicha sociedad, es curiosamente de Africa del Sur. Un detalle que guarda presente este joven en sus dos películas: presentar la prominencia de Africa del Sur en la sociedad del futuro.
Recomiendo ver esta película en sus propios méritos. Aunque no es la mejor del director, si merece la pena verse. Buenas y sorpresivas actuaciones, como la de Diego Luna, quien interviene de forma magistral.
En el año 2010, la revista Times nombró a Neil Blomkamp como una de las 100 personas emergentes que habría de cambiar el mundo. Es curioso, pero la persona que lo recomendó y lo describió en la revista, fue nada más y nada menos que Rigdley Scott. ¿Serán familia?