Mario Conde: un personaje que ha tomado vida propia

Caribe Hoy

altEl detective cubano Mario Conde es uno de los residentes de La Habana más populares que existe. No importa que sea una creación ficticia del insigne autor Lenardo Padura, Mario Conde tiene vida propia más allá de las páginas de los varios libros que protagoniza.

“La gente me pregunta, ¿oye y Mario Conde como va, sigue escribiendo? Y yo contesto que sí. ¿De qué más va a vivir el pobre?”, dijo Padura durante una visita al Festival de la Palabra en San Juan de Puerto Rico, un encuentro de autores y feria de libros en el que dirigió varios talleres sobre la confección de guiones de cine, y fue parte de tres paneles de discusión. Padura también tuvo la oportunidad de promover su nueva novela Herejes, novela compleja que tambien protagoniza el detective habanero. El autor de El Hombre que amaba a los perros es un escritor completo, ya sea de guiones de cine, relatos detectivescos como de novelas que requieren una investigación histórica.

Padura explicó que el personaje de Mario Conde comenzó a surgir en su cabeza ya cuando decide dejar la tarea diaria de periodista en el 1989. Lo concibió como un vehículo para narrar la experiencia de vivir en Cuba en la época contemporánea. Cuando decidió que iba a usar el género detectivesco para este fin, comenzó a explorar lo que existía en Cuba en el género detectivesco pero encontró una serie de novelas panfleteras y propagandistas del regimen de Cuba.

Mario Conde es un tipo que cae bien porque es muy humano, lleno de una suspicacia que le pemite ir más allá de la superficie de lo que investiga, y por ende, de la sociedad habanera. El detective tiene una afición al alcohol, el café y el tabaco y no tiene la mejor de las suertes con las mujeres. Padura dice que cuando se publicó Pasado perfecto, su primera novela detectivesca, le preguntó a varios amigos que tal le gustaba el libro, y la mayor parte le dijo que lo que más que le gustaba era el personaje de Conde.

Padura ha comenzado a trabajar en los guiones de una serie televisiva de ocho capítulos basadas en sus primeras cuatro novelas de detectives. En el Festival se exhibió 7 días en La Habana, una película en la que se tejen siete distintas historias situadas en la capital cubana. El autor escribió el guión para varias de estas historias. La película es una colaboración de varios directores, incluyendo la conocida figura de cine, el puertorriqueño Benicio del Toro El filme sale al mercado en un momento que Padura describe como de grandes transformaciones en Cuba, y hasta cierto punto inserta varios elementos de lo cotidiano de La Habana. Cuba, sentenció el autor, es un país que ha estado más aislada de lo que debiera haber estado y varios de los guiones presentan a una mirada desde afuera, como la del primer episodio que muestra la visita de un turista norteamericano. Hasta que no termine esta tarea fílmica, dice Padura, no va a embarcarse en otro proyecto de escritura novelesca. Explica que el proceso de escribir una novela es uno arduo, comparándolo a correr un maratón; hay una diferencia mental que separa esta escritura a cualquier otra, una que involucra estamina y concentración.

En cuanto al medio televisivo, lo decribió como el medio audiovisual de mayor relevancia en la actualidad, aún cuando el arte mayor sigue siendo el cine. Hay un método particular de escribir para la televisión ya que el público se relaciona con el producto de una manera distinta.