Senado dominicano respalda protección de zona niquelífera

Economia Solidaria

Santo Domingo- El Senado aprobó en primera lectura el proyecto de ley para declarar Loma Miranda, una zona con yacimientos de níquel, como Parque Nacional en República Dominicana, mientras continúa hoy la presión popular a favor de esa protección.

Con ese paso se evitará la explotación de la central zona, rica en biodiversidad y recursos acuíferos, por la compañía extranjera Falcondo Xstrata Nickel y se protegerá el medio ambiente.

La iniciativa legislativa, estancada durante más de un año, recibió el respaldo de 25 senadores y solo uno, Félix Nova, de la provincia de Monseñor Nouel, se abstuvo de votar.

Antes de su aprobación, el presidente de la Cámara alta, Reinaldo Pared, afirmó que en su larga trayectoria profesional pocas veces había visto un proyecto que generara tantos debates.

Llamó la atención a sus colegas de que a raíz del tema de Loma Miranda el Estado se enfoque definitivamente en establecer una política responsable de la explotación minera en el país.

Hace un año, el gobierno dominicano comunicó su negativa al interés de Falcondo Xstrata Nickel de explotar dicho sitio hasta tanto las condiciones socioeconómicas y ambientales, y las tecnologías garanticen una acción sostenible.

Según el ministro de Medio Ambiente, Bautista Rojas, se trata de no comprometer la integridad de los recursos naturales y los servicios ambientales de Loma Miranda.

Comentó que la empresa, conocida antes como Falconbridge Dominicana, mantiene operaciones en dos lugares donde ha causado un pasivo ambiental acumulado que cuestiona el cumplimiento de sus compromisos con la recuperación de las áreas intervenidas.

La oficina del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo en Dominicana anunció el 23 de mayo de 2013 que resulta inviable la explotación de la mina.

El proyecto de Loma Miranda no responde a las exigencias ambientales y sociales, afirmó la entonces representante de ese organismo aquí, Valerie Julliand, al leer un informe de varios técnicos extranjeros.

A juicio de diversos sectores populares y profesionales, tal explotación dañaría las reversas de agua y se afectaría la cuarta parte de la producción de arroz que se consume en Dominicana.

Con la minería a cielo abierto, opinaron, no queda ninguna planta original y desaparecen las aves, reptiles y anfibios asociados a los bosques.

Como empresa transnacional, Falconbridge llegó a este país en 1955, hizo las primeras exploraciones, y 16 años después comenzó la explotación de metales bajo la denominación local de Falconbridge Dominicana.

jf/dsa

Crédito foto: Aterovi, Wikimedia Commons, bajo licencia de dominio público