El bipartidismo nos deja en la quiebra: el PNP y el PPD son igualitos

Economia Solidaria

Este bipartidismo vende patria no sirve; es más de lo mismo. Es un círculo vicioso y como vicioso, este pueblo continúa auspiciando la corrupción del sistema de las oligarquías que le pone a bailar al son que ellos tocan. Como el “flautista de Hamelín” les siguen enajenando con su música de fantasías y engaños, de caras lindas, de juerga, chismes, de comprar conciencias. Y luego -a llorar para el seto- cuando una Ley 7 despide a miles de empleados, una Ley de Sustentabilidad (Ley 7 disfrazada) quita, reduce beneficios adquiridos al obrero trabajador (lo que provoca renuncias), la consolidación de puestos (otra Ley 7 disfrazada que produce despidos por reducción de personal), aumentos en tarifas de AAA, AEE, la reducción del Retiro de empleados (maestros, empleados públicos, pero no para ejecutivos, pensiones Cadillac, jueces), entre otros servicios esenciales como salud, educación, seguridad, transportación por tierra, aire y mar. Vengan los impuestos del IVU (estatal y municipal), Ley de cabotaje para exportaciones e importaciones, CRIM, Hacienda, los contratos millonarios a los “amigos de la casa” ( sean populetes o penepeístas, ambos cortados con la misma tijera).

Según cuentan, ya ascienden a 72 impuestos, entre directos e indirectos, que en cada cuatrienio le siguen aumentando al pueblo el partido político de turno -PPD y PNP- en este círculo vicioso de más de lo mismo y, sin olvidar, que también está la deuda que nos hunde como territorio en el déficit presupuestario, pero los ricos locales y extranjeros se hacen más ricos y nuestra gente (clase media trabajadora y pobre ) se hace cada vez más y más pobre.

El voto en unas elecciones hay que pensar y repensar que al dárselo al PPD o PNP seguiremos hundiéndonos en más de lo mismo. Hay que pensar en los líderes no tradicionales, aunque no estén adscritos a ningún partido político tradicional. Hay que salirse de la injusticia institucionalizada, del monopolio neoliberal y la plutocracia que representa un Gobierno colonial. Prohibido olvidar la mala administración de los gobiernos de turno -PPD y PNP.

El camino es uno, independencia, sí o no, para salir de esta debacle donde no se nos coarte el derecho al comercio internacional y entonces como país libre y soberano podamos tomar decisiones que convengan al pueblo y no a las oligarquías y los grandes intereses del imperio dominante. Boricua, construyamos todos unidos un nuevo país libre, soberano, autónomo e independiente.

Crédito foto: Alex Barth, www.flickr.com, bajo licencia de Creative Commons (https://creativecommons.org/licenses/by/2.0/)