Vasos de Papel y el olfato fílmico de Transfor Ortiz

Cine caribe

altRealmente hablando, el cine puertorriqueño cuando se evalúe, nuevamente, sus últimos 100 años, tendrá que marcar tres momentos: el cine de la DIVEDCO, organismo del Estado Libre Asociado de Puerto Rico para difundir cultura social a través del cine; el cine a partir de Dios los Cría de Jacobo Morales (1979); y la última generación de cineastas, encabezado sin duda alguna por Eduardo “Transfor” Ortiz. Su última película en escena, Vasos de papel (Dir. Transfor Ortiz, Puerto Rico, 2016), es una muestra que comprueba nuestro argumento.


Filmada enteramente en Puerto Rico, nuevamente en el Municipio Autónomo de Caguas, como lo hicieron en su filme anterior, Dominirriquenos (Dir. Transfor Ortiz, Puerto Rico, 2015), nos cuenta una historia de amor dirigida para el mercado de gente joven, en los 18 a 30 años. En la misma, Natalia Lugo, la cantante y ahora actriz, se encuentra con su amigo, Sebastián Borge, y los mismos entablan un diálogo a partir de una carta que él recibe. La carta, el confunde quien la origina, pero a partir de ese mal entendido surge toda una trama que es esencial para entender lo que pasa después.

La película tiene, consistente con la última película de Transfor Ortiz, Dominirriqueños (2015), buenas actuaciones. A parte de estos dos jóvenes actores antes mencionado también se incluye a Camila Monclova, Raúl Carbonell, Luisa de los Ríos, Sully Díaz y Ángel Vázquez entre otros. La fotografía es impecable, y las transiciones y edición de la película, están bien pensadas.

Lo más interesante del cine de Transfor Ortiz, muy similar al Nuevo Cine de la República Dominicana (NCRD) es el hecho de que el mismo está basad en el sentido común nacional. Hay poco que decir en torno a cómo se hacen las películas en Francia, España o Italia. Menos de cómo se hacen las películas en la principal casa productora del mundo, Hollywood. El cine a partir del sentido común nacional, ya sea el del NCRD o el que impulsa en la actualidad Transfor Ortiz, luego de siete películas realizadas, todas ellas exitosas, versa en el hecho de que la gente de Puerto Rico las entiende.

Vayan a ver Vasos de Papel. Sin lugar a dudas es una película ligera, con pocas complicaciones emocionales, simple y directa al grano: para amar, simplemente hay que amar. Transfor, te quedó bien, nuevamente. Adelante.