La abolición de la esclavitud y la vigencia de Eugenio María de Hostos (Segundo de dos artículos)

Voces Emergentes

altTodos los años, el 22 de marzo se celebra la abolición de la esclavitud en Puerto Rico. Es de esperarse que a partir de este año adquiera mayor notoriedad Esto se debe a que las Naciones Unidas declararon el Decenio Internacional de los Afro-descendientes. Este decenio comenzó el 23 de diciembre del 2013 y termina el 31 de diciembre del 2024.

Los países esclavistas se saben cuales fueron, aunque no se mencionan en la declaración de las Naciones Unidas. Estos países tienen grandes universidades, museos, edificaciones suntuosas, gracias al trabajo robado y a la riqueza extraída de las tierras conquistadas. Estos países son los siguientes: Reino Unido, Francia, Portugal, Holanda, Suecia Dinamarca y España

Las Naciones Unidas aprobaron una serie de factores que podrán servir de guía para las celebraciones relacionadas con este evento. Entre estos se encuentran los siguientes:

  1. Una disculpa formal por parte de los países esclavistas.
  2. La ayuda en la repatriación para los que quieran regresar a su lugar de origen en África.
  3. Ayuda para el desarrollo de los descendientes para su rehabilitación.
  4. La creación de instituciones culturales para que se hable de lo que pasó.
  5. El pago de un plan para las enfermedades crónicas y el estrés experimentado.
  6. Erradicación del alfabetismo.
  7. Cancelación de la deuda.
  8. Transferencia de tecnología para el desarrollo.
  9. Ayuda psicológica para los afrodecendientes.

 

Los países del Caribe agrupados bajo lo que se conoce como el CARICOM (Organización de Estados del Caribe); basados en estos factores optaron por pedirle una indemnización a los países esclavistas de Europa y ya han comenzado en el Tribunal Internacional. Puerto Rico participa en El CARICOM como observador, pero hasta ahora no ha llevado ninguna acción sobre éste particular.

Puerto Rico tiene fundamentos validados, para el reclamo de la indemnización y ya Eugenio María de Hostos así lo público en el periódico: El Ferrocarril de Santiago en el 1873. En ese artículo dijo: “Los esclavos fueron burlados inicuamente “Cuando se abolió la esclavitud en Puerto Rico ya el tráfico y venta de esclavos era ilegal, pero todavía los traían a la isla pues era un negocio lucrativo”.

En el artículo de Hostos él describe detalladamente como los esclavos y el resto del pueblo de Puerto Rico fue engañado por el gobierno español en la ley para la abolición de la esclavitud. Su crítica más contundente la hace al describir el artículo IV de dicha ley. Así escribió Hostos, sobre la misma, “Es una ruindad” según él, “España liberadora de esclavos da la supuesta libertad con el dinero de la isla que ha arruinado”. Es una nueva victoria de la desigualdad, porque hace que el dinero de todos los puertorriqueños pague a los explotadores del trabajo esclavo, indemnización que ellos debieron pagar al explotado u que debieran recibir de España que es quien ha autorizado sistemáticamente la explotación.

Este artículo IV de la ley de abolición de la esclavitud dice así: “La indemnización se fija en la cantidad de 35 millones de pesetas que se hará efectivo mediante un empréstito que realizará el gobierno sobre la exclusiva garantía de rentas de la isla de Puerto Rico, comprendiendo en los presupuestos de la misma cantidad de 3,500.00 de pesetas anuales para interés y amortización de dicho empréstito”.

En otras palabras, el gobierno español no le pagó a nadie, ni a los esclavos ni a los propietarios de las mismas. Este hecho maquiavélico y de oportunismo imperial ha pasado de generación en generación. Los negros y sus descendientes se quedaron rezagados porque no recibieron nada al ser liberados. Esta es la razón por la cual las barriadas y los campos rurales marginados, la población mayoritaria es negra o mulatos. Hacen falta voces que digan esta verdad histórica para reivindicar el trabajo robado por la esclavitud y pedirle a España lo que nos debe. Eugenio María de Hostos ya trazó el camino, pero corresponde a los descendientes de aquellos que llegaron en cadenas hacerle esta petición inconclusa  a lo que llamaban “Madre Patria”.