Ghost in the Shell o el tema de nunca acabar en la ciencia ficción: ¿soy humano?

Cine caribe

altAcaba de ser estrenada la versión fílmica del proyecto cultural japonés, Ghost in the Shell (Dir. Rupert Sanders, EE.UU. 2017) es la versión fílmica del proyecto de entretenimiento de dibujos animados, comic, y una serie de televisión que bajo el mismo nombre se generó en los pasados 20 años en Japón. Resulta que la película, se hizo en Hollywood, pero todo lo demás en Japón.

Para los que siguen el tema de la ciencia ficción, se deben recordar que toda manifestación dentro de este género parte de la premisa de la “calma y estabilidad” del eco-sistema. Entonces pasa un evento, que lo altera todo, y a partir de ahí, se desarrolla la trama entre el o la protagonista y el o la antagonista. La literatura de ciencia ficción nos ha dotado con más de un ejemplo sobre este desde que Isaac Asimov, el padre de la ciencia ficción, desarrollara este género en las décadas de 1930 al 1950. La estabilidad del sistema, se quiebra en todo trabajo de ciencia ficción, y a partir de ahí, la lucha por restablecer el orden.

Sin entrar en la historia de Ghost in the Shell, la cual le pertenece pura y enteramente a los japoneses, Hollywood nos presenta la primera versión fílmica de un proyecto de entretenimiento cultural que ya es parte del culto de múltiples generaciones nacionales como internacionales que siguen esta historia. En esta ocasión, en la película de Sanders, si usted no conoce nada de la historia, aún lo puede pasar súper. Si usted conoce la historia, la japonesa sobre este filme, pues entonces podría tener reparos, unos cuantos por lo pronto.

Ghost in the Shell versa sobre la historia de Major (Scarlett Johansson) quien trabaja para una división especializada de la policía de Japón. Estos intentan descifrar si el principal manufacturero de robots, Hanka Robotics, ha iniciado un proceso de desestabilización contra el gobierno de su país. La historia, en cierta medida, consistente con muchos filmes de ciencia ficción, guarda componentes similares: la mega corporación, el mundo robotizado, y sobre todo si lo no humano puede controlar lo humano. Para muestras un botón: Blade Runner (Dir. Ridley Scott, EE.UU., 1982-1992).

Consistente con la trayectoria del cine de ciencia ficción, y en particular en el inspirado en la obra de Phillip K. Dick, en gran novelista norteamericano sobre el tema, la pregunta que Major/Johansson debe contestar, es ¿Qué es lo humano? A partir de esta simple pregunta, usted debe ver esta película.

A mi entender, Ghost in the Shell es una contribución fílmica al género de ciencia ficción, que, por la selección elocuente de los parlamentos, su estética fílmica, y más que nada las actuaciones de Major/Johansson y su contra parte, Kuze (Michael Pitt), merecen ser apreciadas. Esto incluye en un rol secundario a la laureada actriz francesa Juliette Binoche (Dr. Oulet), quien nos deslumbra.

Nada, que tienen que ver esta película. Si usted desea filosofar, la va a ver. Si usted desea discutir a partir de los juegos animados, vaya a verla. Pero si usted desea continuar los debates centrales de la ciencia ficción, Ghost in the Shell es el último capítulo a leer. Adelante.