“El secretismo, la censura, la falta de honestidad,
y el bloqueo de la comunicación,
amenazan todas las necesidades básicas.”
Abraham Maslow
Ya usted lo ve. Nada de decir nada. Simple, ¿verdad? Entonces me fui a buscar libros que llevaban algunas décadas cayéndose de silencio; no quiero decir polvo, porque me sacan de contexto y me vuelve a censurar Doña Perfecta, no, no la de Benito Pérez Galdós, ¡que va, cristiano! Ay ¿se dan cuenta? cristiano, otra palabra sacrílega, plural, tan democrática como el pararrayos de Benjamín Franklin, ese gran americano que firmó los pliegos de la Constitución de la Republica Americana. Oiga, ¿Por qué a EU no le llaman república, y a Costa Rica, Panamá, Cuba, si?
No sé, yo solo salgo del tintero de Harold Jessurun; salgo con alas de pájaro, verbo irreverente, digo verdades, busco decir que hay que cambiar el mundo, desde cada día, desde cada civismo, desde cada poema, desde cualquier barra, o mesa de dominó. Mire que no estamos para seguir ‘’embuchaos’’ cagando fuera del pote ¡uff se me salió la palabrota! Pero, ahí vamos, si ya le dije zafacón a Doña Perfecta, no, esa no, la de Benito no, la de allá del capitolio. ¿Oigan, cómo será comerse un plato de guineítos con Corned Beef bajo el poder del Espíritu Santo? ¿Oigan, cómo será cortarle la voz a un pueblo usando de parapeto a Cristo que bien “enfogonao” sacó los mercaderes del templo?
Busco en los libros, y encuentro, una cita, dos, tres, millones hablando de la censura, de lo que pasa cuando un pueblo calla, de cómo se destruye una sociedad por la falta de tolerancia, el fundamentalismo, la mala costumbre de justificar “valores cristianos” para sesgar el libre pensamiento y peor, el Pensamiento Crítico. Para mí, fue un asesinato a plena luz del día, nos hirieron de muerte, así, como una escenita de esas películas de Martin Scorsese, esas de casinos, y bichotes dando órdenes de ejecución, pero, no, no crea usted, en nombre de Cristo se han cometido, vaya, las atrocidades más grandes, y, ¿dónde está Cristo? ¿muerto de la risa en un palco del paraíso dándose una cerveza con el diablo? No, compas, esto es peligroso, así que decidí manifestarme, ya que se joda, si la vieja esta, llamó al periódico y nos botaron, poco importa que diga el resto.
Contra, yo pensé como Pepito que me llamo, que habíamos pasado página, pero es que este pueblo es morón, dejan que les pase el camión por encima y lloran como masoquistas; este pueblo que amo tanto, pero que duele tanto. Mire ahora mismo, como una comunidad de Peñuelas, lucha a cuerpo y espada por su vida, y los políticos, esos barracos de la brutalidad y el desajuste justificando todo. Encima, le mandan la policía, ¡oh democracia divinamente cristiana! ¿Cristo viene? Primero viene el meteorito que la NASA pronostica se acercará bastante a la tierra para el 2024 que el Cristo de la Charbounier, sí, ahora digo su nombre para que Pérez Galdós no jale por las piernas, que me da vergüenza, la censura de un sistema, el dinero, los intereses políticos te cortan la expresión, así como cortar chuletas para la barbacoa. Nos quieren con silencio, nos encierran, eso creen ellos, aquí hay militancia, no dejaré que Harold, me eche al olvido, juro que nadie nos va a olvidar y juramos que seguiremos diciéndole zafacón a esta miseria que se llama política. Nada que callar, seguir es la proclama, ¿entiendes? En nombre de Dios o del Diablo como dijo alguna vez don García Lorca ‘’por obra de Dios o de lo que sea” ¡Tata, se te quemaron las habichuelas! Tu censura, nos hace más grandes, más combativos, y más de fuerza con el pueblo.
No nos callaran, y ya Harold, prepara desde mi alma su próxima caricatura.