República Dominicana informa de crisis de salud en frontera con Haití

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El Ministerio de Salud Público informó hoy de la activación de una alerta epidemiológica en los centros de salud fronterizos, luego de que Haití declarara el pasado jueves que se detectó en varias zonas de esa nación una infección cutánea similar a la sarna y que se considera “altamente contagiosa”.

Así lo dio a conocer a los medios el vocero de la entidad, Carlos Suero, quien además señaló que los especialistas locales están pendientes de cualquier diagnóstico que pudiera registrarse en las zonas limítrofes de ambos países.

Sin embargo, aclaró que “hasta el momento no tenemos registro de ningún tipo de brote ni de enfermedad contagiosa en la piel”.

La advertencia implica el chequeo o control de los haitianos y dominicanos que acudan a diferentes hospitales nacionales, que crucen por los pasos fronterizos y tengan alguna alteración sospechosa en la piel.

En las próximas horas el organismo sanitario prometió dar a la publicidad un comunicado más detallado con relación al caso.

La sarna es una patología contagiosa de la piel causada por un parásito, llamado arador de la sarna, que se introduce debajo de esta y que se alimenta de las células superficiales; se caracteriza por la presencia de una multitud de vesículas que producen picor.

El jueves, el Ministerio de Salud Pública de Haití advirtió sobre una infección en la piel con características parecidas a las de la sarna.

“El Ministerio aprovecha esta oportunidad para aconsejar a cualquier persona que presente los siguientes signos y síntomas que acuda a la institución sanitaria más cercana: picor y lesiones cutáneas que pican, especialmente por la noche”, detalló el organismo público a las agencias noticiosas internacionales radicadas en ese país.

Asimismo, las autoridades sanitarias, que no han dado cifras concretas de infectados, recomendaron adoptar una serie de medidas para evitar contagiarse y propagar la nueva enfermedad, entre ellas hervir y desinfectar la ropa, las sábanas, las almohadas y las toallas; ventilar los espacios y bañarse con agua limpia.

Además, evitar rascarse la piel a pesar del deseo de hacerlo y estar atentos a no propagar la enfermedad a otras personas.

La falta de infraestructuras adecuadas, el hacinamiento en los barrios populares y el poco acceso al agua son un caldo de cultivo para la propagación de estas eventualidades sanitarias en Haití, que en 2010 enfrentó un brote de cólera con un saldo oficial de 10 mil fallecidos, aunque organizaciones sociopolíticas y de derechos humanos aseguran que la cifra real puede ser tres veces mayor.

La ONG Médicos del Mundo alertó en febrero que 4,4 millones de personas, cerca del 40 por ciento de la población, necesita ayuda humanitaria en ese pueblo isleño, donde casi medio millón de personas vive sin agua corriente.

La situación se ha agravado a raíz del terremoto de magnitud 7,2 en la escala Richter que tuvo lugar el 14 de agosto de 2021 y que dejó más de dos mil muertos, 60 mil edificios derrumbados y más de 75 mil inmuebles dañados.