Licencias de conducir para todos los inmigrantes en Puerto Rico

El problema que existía anteriormente era que un extranjero podía conducir un vehículo de motor en la Isla, con su licencia emitida en el extranjero, por un término no mayor de 3 meses o 90 días, a partir de su entrada en territorio de los Estados Unidos. Luego de estos 3 meses tenía necesariamente que solicitar su licencia de aprendizaje de Puerto Rico. De esta persona aprobar el examen escrito y haber someter todos los papeles requeridos tendrían su licencia provisional.

El asunto era complicado, ya que el Departamento de Transportación le requería a los extranjeros que junto a los documentos solicitados sometieran su estatus migratorio y conforme a la fecha de este le darían su licencia. La lógica era que el gobierno de la Isla no podía emitir un documento de identificación oficial, con una fecha distinta al visado o permiso de residencia, que fuese mayor que la que permitía el Departamento de Inmigración de los Estados Unidos (INS). En otras palabras, que había una relación directa entre el estatus migratorio y la licencia del gobierno. Lamentablemente, las personas que no tenían su estatus migratorio en orden no podrían obtener una licencia de conducir.

Esta dependencia del Departamento de Transportación con la información del INS conllevaba problemas técnicos; ya que como es sabido por todos, la Ley de inmigración de los Estados Unidos es muy antigua y tiene grandes fallas, que aún no se han corregido por la legislatura de los Estados Unidos. Esto por un intenso cabildeo de grupos racistas, que durante años se han resistido a cualquier reforma migratoria en ese país. Un ejemplo de situaciones anómalas del antiguo sistema era el de las personas que estaban en un estatus migratorio transitorio, digamos el clásico, en la obtención de su “Green Card”, a estos no se podría dar su licencia de conducir aun habiendo cumplido con todos los requisitos del INS.

La nueva medida legislativa lo que busca es mayor autonomía regulatoria fuera del INS. Conflictos que nunca debieron existir, ya que el mismo gobierno federal mediante la llamada REAL ID implementada en el 2009, y como parte de muchas de las reformas de post 9-11, creó la posibilidad de que los Estados emitirán identificaciones que cumplieran con todos los requisitos de seguridad a nivel nacional e internacional. No obstante, la pasada administración del PNP y de don Luis Fortuño; miembro y líder dentro del Partido Republicano, que son los grandes opositores a reformas migratorias, no vieron la necesidad de incluir a los inmigrantes en estas reformas del REAL ID, como lo hicieron los Estados con grandes poblaciones de inmigrantes. Así las cosas este gobierno popular ha tomado este tipo de medida seriamente, reconociendo las necesidades de las comunidades de inmigrantes en la Isla, mayormente del Caribe, y específicamente la comunidad dominicana que ostenta en decenas de miles.

Bajo la Ley 73 del 2013, una persona que tiene un pasaporte o una identificación emitida por un consulado puede solicitar su licencia de conducir de aprendizaje. No necesita una previa licencia de conducir y más importante no necesita tener su estatus migratorio al día. En otras palabras, que el gobierno de la Isla no depende de la INS para dar una licencia. Es meritorio mencionar que las licencias de conducir son un documento de identidad muy importante y que según las estadísticas del Departamento de Transportación una gran porción de los poseen esta no la utilizan para conducir un vehículo necesariamente, más bien como documento que los identifique. En ese sentido, todos salen ganado, el gobierno porque puede garantizar seguridad en las vías públicas y los inmigrantes porque pueden tener su Id.