La ética ambiental debiera estar incluida en cualquier plan educativo

Justicia Social

altEstamos en un momento crítico hacia un cambio en el sistema de educación pública.  Por lo que se está hablando en varios foros para la creación de un plan decenal de educación, cuya metodología de enseñanza esté libre de los cambios en el gobierno de la Isla, y cuyo enfoque cambie del tradicional de buscar fondos, los maestros y maestras, y de la infraestructura hacia uno más enfocado en el plan educativo, que no se ha revisado en los últimos años.

Para lograr este plan, organizaciones y varias fundaciones como Agenda ciudadana, entre otras están formulando sugerencias a la Cámara de representante para la creación de un proyecto de ley.  No obstante, el tema de la educación en ética ambiental no logra ser prioritario en la formulación de políticas públicas de educación en las escuelas públicas, siendo igualmente crítico el actual estado en que se encuentra el medio ambiente en nuestra Isla.

Es importante mencionar las razones de porqué la Fundación Agenda ciudadana ayer estaba tratando, con todos los medios publicitarios, de formular política pública, mediante la creación de un proyecto de ley para el plazo decenal en la Cámara de representantes.  La razón es que por ser un asunto que tiene que ver necesariamente con medidas de presupuesto y económicas es esta rama de la legislatura la que tiene esas competencias en el proceso legislativo.

Todo esto está muy interesante, pero nuevamente regreso a mi dilema de por qué no se intenta formular política pública y legislación a los efectos de crear educación que se enfoque en la ética ambiental.  Será porque no está dentro de las exigencias de Agenda ciudadana, por falta de interés o desconocimiento.  La realidad es que éstos responden a las propuestas de su base comunitaria e igualmente a sus alianzas que incluyen el periódico El Nuevo Día, entre otros grandes ricos de la Isla.

La ética ambiental en mi opinión es fundamental para cuidar, desarrollar y proteger nuestro medio ambiente.  Más aún en los tiempos en que nos ha tocado vivir de grandes cambios climáticos.  En ese sentido, es nuestra responsabilidad ciudadana de exigir que en las escuelas públicas del país enseñen amor y respeto al medio ambiente.  Eso se logra mediante la ética ambiental.

Es sencillo, si no le dedicamos interés, amor y pasión a nuestro medio ambiente en el ámbito educativo, nos tomaríamos el riesgo de que ocurran graves daños irreparables.  Es inminente, que cualquier plan de educación en al país contenga los principios básicos de la ética ambiental.  Al día de hoy, los daños ecológicos en la Isla son notables y simplemente no podemos rendirnos a los intereses de grupitos que no incluyan políticas dirigidas a la ecología.