¡Azucar! en conmemoración de la siempre reina de la Salsa Celia Cruz

Cultura

En el día de hoy, celebramos el natalicio número 88 de la Reina de la salsa, Celia Cruz.  Nacida en La Habana, el 21 de octubre de 1925, de una familia de clase trabajadora, en la que su padre fue carbonero en las ferrovías y su mamá ama de casa.   Precisamente, por vivir un estándar de vida cómodo, en relación con otros afro descendientes en esa Isla, pudo interesarse en el arte del canto.

Así las cosas, Celia desde niña participó en conciertos, actividades e inclusive programas de radio que tocaban música afro caribeña.  Posteriormente, logró ser la cantante de la Sonora Matancera, una de las orquestas más importantes de Cuba, con éxito internacional.  Cabe mencionar, que el período en que Celia se crío en Cuba fue uno de plena aceptación por la música afro cubana, por todas las clases sociales, donde inclusive hubo operas de este tipo de música por el distinguido compositor Ernesto Lecuona, entre otros.  En síntesis, Celia vivió el período dorado de la música cubana, que el Dr. Fernando Ortíz llamo el redescubrimiento de Cuba en su cultura africana.  Aclamada no solo en su natal Cuba, como una de las mejores cantantes, Celia se dio a conocer en todo el mundo, siendo la más distinguida embajadora de la Salsa y de la música afro cubana.

Con el triunfo de la Revolución cubana, Celia decidió irse de su natal Cuba y fue inicialmente a México, donde había logrado éxito comercial con su orquesta, la Matancera.  Consecuentemente, durante toda su vida, Celia denunció la revolución cubana y fue consistentemente anti castrista.  No obstante su amor por la música cubana perduró siempre.  En la década de los años 1960, ella se trasladó a Nueva York y se destacó como cantante en el período de oro de la música latina en esa ciudad, donde frecuente habían espectáculos por artistas como la orquesta de Tito Rodríguez, la orquesta de Pérez Prado y la orquesta de Tito Puente.

Durante la década de los 1970, la disquera de Nueva York Fania, con una nueva propuesta musical y con un plan de internacionalizar la música afro cubana contrató a Celia Cruz.  A partir de Fania, la popularidad de Celia se internalizó y se indudablemente la reina de la Salsa.  Con Fania, Celia se destacó como solista, ya no era la cantante de una orquesta, más bien fue el centro de la atención de los músicos de Fania.

Durante su carrera musical viviendo en los Estados Unidos, Celia se distinguió por un sonido que fusionó distintos géneros musicales de origen africano.  La creatividad de sus piezas rompieron muchas barreras y son piezas que gustan mucho al día de hoy.  Igualmente, su personalidad escénica ganó notoriedad, con vestidos regales y mucho joyería, no había duda de que era la realeza de la salsa.

Lo más importante de la carrera de Celia, es que logró ser la embajadora más reconocida de la cultura afro cubana en todo el mundo.  Siempre llevando su alegría y esencia a todos con su música y personalidad.  En el día de hoy, celebramos a una artista cubana, que siempre nos dio lo mejor de sí y del Caribe para el mundo.