El país refleja, de forma desastrosa, un incremento en los niveles de desempleo. En el pasado mes de octubre subimos a la cifra de 14.7% de desempleo nacional. Es una cifra terrible. Entonces, ¿qué podemos hacer? Mientras esta cifra se dispara, un policía patea a un gatito en Bayamón, y es suspendido de trabajo y acusado por maltrato de animales.
En paralelo, matamos a los pavos para comerlos el jueves en la tradicional fiesta de acción de gracias de los EE.UU, y el viernes nos dedicamos a comprar en las mega tiendas de los EE.UU, en el mal llamado “viernes negro”. En fin que nadie sale contento, y mientras todo esto pasa, seguimos en el desempleo.
Un policía acusado de maltrato, no puede ser la principal noticia pública del país. Matar a los pavos para darle gracias a Dios, es un acto de sacrificio tipo los aztecas. En fin, que comprar y comprar este próximo viernes solo beneficia a las tiendas foráneas que habitan en Puerto Rico. Mientras, el desempleo y la destrucción de empleos formales, siguen azotando al país.
Ahora bien, como podríamos transformar el país. Esto es un asunto de suma importancia, pues realmente hablando la única senda a seguir es la de la autogestión nacional. No depender de los fondos federales ni de las iniciativas de Washington, sino depender de las cosas y gestas que de forma colectiva o individual podamos hacer desde Puerto Rico.
Entonces, toda acción que cree empleos en el sector de la agricultura o servicios, los dos únicos renglones que no tuvieron pérdida de empleos sino crecimiento, nos debe invitar a pensar cómo transformar la cultura actual por un de activismo económico. Es decir, tenemos que sentarnos a producir, de forma independiente o colectiva, pero producir para sobrevivir.
En fin, que esto va mal, pero no tan mal. A lo menos, no si usted está sembrando como mínimo plátanos en Puerto Rico o en el Caribe.