Cuando escribí la columna “Juano Hernández, el olvidado”, que publiqué en El Nuevo Día en 1988 hace casi 29 años, resalté el gesto del querido amigo Jacobo Morales de dedicarle a Juano su primera película Dios los cría.
Muchos recuerdan el hotel El Platanal que Juano construyó en la carretera del barrio Cepero de Trujillo Alto, donde hoy radica la urbanización Villa Andalucía. Allí también tenía un parque de diversiones con 12 deportes y un salón de baile, además de su residencia y una finca en la que cultivaba frutas y verduras. Según Miluka Rivera, la finca le costó $ 40,000 y llegó a producirle $ 30,000 anuales.